El mercado tasa en 21 céntimos de euros el kilo de esta oleaginosa
Los incentivos europeos mejoran la rentabilidad de la colza
Los agricultores logran más ingresos brutos con esta semilla que con la siembra de cereal
Los agricultores del sur de León ya cultivaron en sus tierras colza. El escenario era otro; el destino de la cosecha también. Y el fraude en la manipulación del aceite cerró en España cualquier perspectiva de futuro. Ahora, el encargo, lleva anexo el cálculo de la rentabilidad. Sembrar colza para suministro de la incipiente industria elaboradora de biocombustibles resulta más rentable para un agricultor leonésque dedicar las tierras a cereales de secano, de regadío o maíz; incluso, en algunos casos, los ingresos brutos que aporta la cosecha de una hectárea de colza es superior a los que reporta el maíz a precio de mercado. Sec toma como referencia el cálculo de que en ese espacio de terreno, la simiente de colza acaba con una cosecha de 1.500 a 2.000 kilos. Se incluye en la subvención de 47 euros por hectárea y por el 10% de las tierras de retirada que se establece por cultivos bioenergéticos. León tiene una experiencia reciente sobre la siembra de colza; las 110 hectáreas que contrató EHN de Navarra con Ucogal; la cosecha se refinará en la planta de la empresa integrada en Abengoa. Cada kilo se pagará a 21 céntimos. Los incentivos oficiales acentúan la rentabilidad de la operación.