El 80% de los fumadores quiere dejarlo pero sabe que abandonar este hábito será muy difícil
Estanqueros, hosteleros y médicos exigen control para evitar que se adultere el tabaco
En un cigarrillo hay hasta 1.440 sustancias diferentes, entre ellas, amoniaco
La ley antitabaco ha demostrado una vez más que es polémica. Así se puso de manifiesto ayer en el transcurso del debate de «El Diario de León tiene la palabra en la Ser» que abordó la nueva legislación. Una de las pocas cuestiones en las que coincidieron los puntos de vista fue en la necesidad de controlar los ingredientes con los que se fabrican los cigarrillos, causantes de la adicción del tabaco. Así lo señaló el doctor Andrés García Palomo, coordinador del Servicio de Oncología del Hospital de León, que calificó de necesaria la ley antitabaco y explicó «que se han encontrado hasta 1.440 sustancias diferentes en un cigarro, tales como amoniaco, mentol o la urea, sustancias que producen que la nicotina penetre mucho mejor en el cerebro». En este sentido, el doctor García Palomo agregó que «habría que mejorar la calidad del tabaco y venderlo sólo en lugares concretos». Por su parte, el secretario de la Asociación de Expendedores de Tabaco de la Fele, Jorge Carballal, también afirmó que «habría que quitar los productos con los que se hace el tabaco en la actualidad, pero al Estado no le interese meterse en la raiz del problema». De hecho, aseguró, el tabaco no tiene fecha de caducidad, algo que ya están reivindicando desde el sector. Además dejó claro que «si al Estado lo que le preocupa tanto el tabaco lo mejor sería que sólo lo dejara vender en estancos y puntos de venta autorizados». El presidente de la Asociación de Hosteleros del Barrio Húmedo, Raimundo Alonso, aseguró que serán el sector más perjudicado por esta normativa y recordó que el tabaco se vende en los bares «como un servicio más al cliente y que si han proliferado las máquinas expendedoras, lo han hecho para controlar la venta». Además puntualizó que «si quieren prohibir el tabaco, que prohíban su venta». El psicólogo de la Asociación Leonesa Contra el Cáncer, José Antonio de Abajo, también estuvo de acuerdo en que existe adulteración en el tabaco, aunque también reconoció que un 80% de la población fumadora que sabe que el tabaco es un factor de riesgo, le gustaría dejar de fumar, aunque reconoce que abandonar este hábito es muy difícil.