| Análisis | Doblemente marginadas |
Las trabajadoras autónomas piden ayuda a la maternidad
Las emprendedoras no cuentan con ayudas para hacer contratos de sustitución después de tener un hijo, una situación de desventaja en comparación con empleados del régimen general
Si los trabajadores autónomos se consideran en general discriminados en el sistema de ayudas y las condiciones de las bajas, por ejemplo, les colocan en una posición de desventaja con respecto a los trabajadores del régimen general, el caso de las mujeres que optan por crear una empresa, o simplemente emplearse a sí mismas, es de doble marginación. Una discriminación que empieza en los trámites básicos de constitución de las empresas, como la solicitud de créditos. Según la Asociación de Trabajadoras Autónomas y Emprendedoras, es frecuente que para iniciar su aventura empresarial los bancos les reclamen un aval, generalmente de sus maridos en el caso de que estén casadas. Sin embargo uno de los problemas que consideran más acuciantes estas empresarias por cuenta propia es el de la maternidad. Tras dar a luz, las autónomas cuentan con las 16 semanas de baja preceptivas. Sin embargo, y en contra de lo que ocurre a la hora de buscar una sustitución para las trabajadoras del régimen general, las autónomas no tienen ningún tipo de ayuda administrativa para contratar a una persona que atienda su negocio durante su periodo de baja. Es un ejemplo, pero estas mujeres con iniciativa podrían contar muchos más. Para defender sus intereses se constituyen en esta asociación, integrada en la unión de autónomos general, pero con un tinte marcadamente femenino. Y una consigna: reivindicar, por encima de todo.