La iniciativa pertenece al plan de accesibilidad para la eliminación de obstáculos arquitectónicos
Un programa identificará las rutas con menos barreras para los discapacitados
Los disminuidos dispondrán de información sobre las barreras en los edificios públicos
A golpe de ratón, en un clic de ordenador, los disminuidos leoneses verán ilustrada en la pantalla virtual cuál es el itinerario más conveniente para unir origen y destino sin trabar excesivamente su tránsito con barreras arquitectónicas, obstáculos que serán señalados con su ubicación concreta y la cuantificación de su dificultad; a la vez que conocerán el estado de los accesos y el modo de franquearlos en los edificios públicos. La herramienta es el primer producto del plan de accesibilidad para la integración de los disminuidos, firmado el pasado año por el Ayuntamiento con la Secretaría de Estado de Asuntos Sociales, que se encuentra aún en su primera fase: examen del estado de la estructura comunicativa de la capital leonesa. A partir de esta materia prima, el consistorio adquirirá en los próximos meses un programa informático de información geográfica que ordenará los contenidos y los priorizará según criterios de búsqueda, para que los vecinos puedan interactuar y resolver sus necesidades particulares. Los trabajos de puesta en marcha de la iniciativa darán comienzo en el mes de abril, después de que se cierre el plazo de desarrollo de la fase de recogida de datos. Dada la extensión geográfica, los técnicos de la Concejalía de Urbanismo han acotado un área de actuación a modo de avance, que posteriormente se extenderá a todo el término municipal. El núcleo escogido comprenderá todo el casco antiguo, el Polígono 10, El Ejido, Fernández Ladreda, Papalaguinda y Condesa Sagasta, sin entrar en la zona de Eras de Renueva. Hasta el 2008 El convenio firmado por el Ayuntamiento con la Secretaría de Estado de Asuntos Sociales establece que en el plazo de tres años se llevarán a cabo las reformas para adaptar la ciudad a los requerimientos de la ley de accesibilidad, que fija su cierre en el año 2008. Una vez que se dé por finalizada la fase de información, los servicios técnicos municipales deberán trasladar al organismo estatal sus peticiones argumentadas para optar a la bolsa de financiación, con la que se efectuarán las obras y que se añadirán a la herramienta de orientación para los discapacitados.