Mimos para celebrar el «cabo de año»

Había advertido Amilivia durante los días previos de que «el PSOE intenta caricaturizar la realidad», pero no se imaginó que para conmemorar los doce meses de la moción de censura los socialistas montarían frente a Botines 14 pedestales con cajas de coca-cola y subirían otros tantos mimos: túnica negra, cara pintada de blanco -excepto los dos correspondientes a De Francisco y Soto, que llevaban máscaras- y gorros negros, con un cartel en el que figuraba el nombre de cada una de las concejalías. «Representan con un solo golpe de vista el año de parón absoluto en las políticas municipales de desarrollo» argumentó el ideólogo de la iniciativa, Ibán García del Blanco, quien apuntó que el actual equipo de gobierno «ha recuperado el enfrentamiento con los ciudadanos, el despilfarro y la política de empleo como política de clientes. Amilivia es cero». Había tanto silencio en un inicio que alguno de los pensionistas que trabaja junto a Gaudí en la plaza pensó que era un cabo de año. «Es un agradecimiento a los ciudadanos que estuvieron apoyándonos hace un año; entendemos que esta es la mejor forma de hacerlo, venir a la calle y estar con ellos», explicó el ex alcalde, Francisco Fernández, mientras se arremolinaba poco más de un centenar de personas, curiosos en su amplia mayoría, en torno los impertérritos voluntarios de Juventudes Socialistas. «¿Es teatro de calle?», preguntaba una señora a su marido. «Calla. Vamos a acercarnos a ver qué dicen y mañana ya veremos lo que ponen los periódicos».