| Reportaje | Tradición de siglos |
Al pie del cañón con Santa Bárbara
El cuerpo de artillería rindió ayer pleitesía a su patrona en un emotivo homenaje en el cuartel Conde de Gazola de El Ferral en el que resaltaron su dedicación y fidelidad a España
Los artilleros rindieron homenaje a los caídos en acto de servicio
Cerca de 800 personas, entre civiles y militares, se dieron cita en el cuartel militar de El Ferral ayer para rendir homenaje a Santa Bárbara, patrona y protectora de los artilleros. La jornada se inició con una misa solemne como muestra de gratitud a la patrona para dar paso a los actos previstos en los que se solicitó «su eficaz amparo y protección para dar un servicio mejor a España». El obispo de León, Julián López, presenció el acto castrense junto al subdelegado del Gobierno, Francisco Álvarez y el delegado territorial, Eduardo Fernández, entre otras personalidades, durante una mañana «de verano militar», a pesar del viento y del frío intenso que acompañó todos los actos. Tras el compás del himno nacional, el jefe del regimiento de artillería de campaña número 63, Juan Pinto Mayoral, dedicó unas palabras en honor a Santa Bárbara, y agradeció a todos los miembros del ejército la labor que realizan día a día. Resaltó que a lo largo de la historia los artilleros se han caracterizado por «el compañerismo y por el amor a su tradición». «Los artilleros más jóvenes tienen la responsabilidad de mantener y transmitir los valores adaptados a la evolución de los tiempos», insistió. Una salva de 13 cañonazos Los actos más emotivos se centraron en el homenaje a los caídos y en el momento en que una salva de 13 cañonazos ahogaba el silencio que siempre caracteriza estos actos. «Esta unidad quiere transmitir el sentido de unidad al resto de los españoles», adujo Mayoral. En la actualidad tienen desplegada una enorme actividad, operaciones de paz y cooperación internacional en diversos ámbitos. Pinto destacó la tenacidad del cuerpo de artillería «que siempre está dispuesto y al pie del cañón». Durante su discurso reiteró que mantendrán siempre «la fidelidad a España, el espíritu de ejercicio y la entrega en el cumplimiento del deber». Tras la disertación, se procedió a la entrega de condecoraciones por los méritos militares a un nutrido grupo de profesionales, que recibieron medallas por su dedicación y buen hacer a lo largo del año. Cerca de 400 militares entonaron el himno a los caídos y el de artillería antes de romper filas para dirigirse con sus familiares y amigos a celebrar un día tan señalado con un vino español, que se prolongó hasta bien avanzada la tarde.
