«Hubo una mínima parte de empresarios leoneses que tomó partido en la moción»

Se toca el nudo de la corbata: «Parezco Harry Potter», y se ríe. La gracia queda ya 12 meses atrás y en los carteles del pasillo Francisco Fernández (León, 1955) recuerda: «Ha pasado un año y no ha pasado nada». -Eso es publicidad agresiva. -Pues no, lo triste es que no ha pasado nada y que hemos tenido un año parado. Pero nos preocupa, más que lo pasado, el futuro. Nos preocupa León y hacer el trabajo que necesita; en eso estamos: trabajar desde nuestra posición y también para cuando gobernemos. -Entonces, ¿qué ha hecho el equipo de gobierno? -Ha estado más preocupado de sí mismo que de la ciudad de León. Pero sinceramente, nosotros quizá, aunque suene raro decirlo, no hemos estado preocupados del equipo de gobierno, sino de llevar adelante los proyectos que León necesita y tener la información necesaria para que cuando ha habido problemas con los distintos ministerios, con todas las relaciones que mantenemos, se pudieran solventar esas situaciones. -¿Ese ha sido su trabajo? -Ha sido una trabajo de oposición, pero de oposición como gobierno. Hemos estado trabajando por los distintos proyectos que nosotros iniciamos en su día, para que a pesar de las circunstancias habidas por la moción y que supusieron un retraso se mantengan en vigor y tengan una trayectoria normalizada de su desarrollo. -¿Ralentizar puede ser sinónimo de paralizar? -No, para nada. El Gobierno lo que ha tenido y tiene es mucha dificultad para seguir con los proyectos que se iniciaron en su día, en el sentido de la relación con este equipo de gobierno. Están más ocupados en ver cómo continúan en la vida política que de lo que es realmente gestión para desarrollar los proyectos. Es la situación con la que hay que convivir, por lo menos de momento. -Eso de que una parte de su campaña dependa de Zapatero, ¿no le preocupa? -Al contrario, porque nosotros lo que tenemos es una serie de compromisos con la ciudad que hay que ir cumpliendo. Yo estoy seguro de que va a ser así, por lo tanto no es un motivo de preocupación; el motivo de preocupación es seguir superando todo lo que suponen las tensiones lógicas de llevar un proyecto adelante en colaboración con distintas administraciones. Pero estoy convencido de que el Gobierno de Zapatero va a cumplir sus compromisos. -Parece que madruga la precampaña. -Las precampañas no es que sean de un año y cinco meses, yo creo que son desde el día que tomas posesión hasta el día de las elecciones. La precampaña es estar demostrando día a día cuál es el trabajo que estás realizando, y hay una valoración que los ciudadanos hacen también día a día. Eso es lo que yo considero una campaña continuada y por lo tanto vamos a seguir en ella. -¿No teme que la gente entienda que se ponen la zancadilla mutuamente? -Entiendo que exista esa percepción, porque es muy difícil que cuando un gobierno no hace de gobierno sino de oposición, y la oposición de gobierno, desde el punto de vista responsable, es difícil no transmitir esa imagen. Eso puede llevar a que parezca que existen ese tipo de zancadillas. -Ya hace más de un año que se la pusieron a usted... -A la ciudadanía no le gustó nada la moción y el cambio que produjo. Es algo que tiene un momento para exteriorizarlo: el día de las próximas elecciones municipales; ahí vamos a verlo y estoy convencido de que va a pasar factura. -¿Esa factura tiene algo que ver con las encuestas que manejan? -Puede haber encuestas que nos den una buena situación desde el punto de vista electoral, pero entiendo que las mejores encuestas, que son las que valen, se ven el día que se celebran las elecciones. Eso sí, siempre que hay un buen ambiente y se constata un apoyo por parte de la ciudadanía es algo que gratifica y estimula; en ese sentido, estamos con las pilas a tope, hay que reconocerlo. -¿Qué cree que ha perdido León desde que no es alcalde? -Hay una cuestión clara, no por lo que digamos nosotros: León hace un año entraba en un periodo de promoción de la ciudad, iniciativas importantes..., lo que supuso un estado de ánimo muy positivo. Incluso se vio hasta en los propios empresarios de la ciudad, que tomaron parte activa y decisiones importantes a la hora de promocionar la ciudad en cualquier campo. Una vez que surgió la moción fue un jarro de agua fría, una vuelta a los mismos actores y la misma situación de la que parecía que León se había librado. Pero bueno, también hay que convivir con la realidad y estoy convencido de que la ciudadanía está esperando el León que viene, y ese León que viene es un León de más futuro. -¿Hubo también empresarios activos en la moción? -Hubo una minúscula o una mínima parte de los empresarios leoneses que tomó parte activa en el cambio de gobierno, pero satisfactoriamente para mí es esa parte de empresarios que representan el pasado y yo prefiero estar en el futuro.