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Noticia: Señora agradecida dona 60.000 euros al asilo municipal
Josefina Díez González deja su herencia a la instalación encargada del cuidado de los ancianos, mientras las mojas que la dirigen ya avisan al Ayuntamiento de que no distraiga la bolsa
El método ortodoxo de colaboración con el erario público acude a los impuestos como excusa. Que si el agua, que si la recogida de basuras, que si el coche se queda en lugar prohibido y la policía es más rápida que para arreglar un atasco... Pequeñas contribuciones con las que hacer que las necesidades de todos tengan el mismo remitente, obligatoriedad mediante. Luego están las contribuciones desinteresadas en plan mecenas que se ven generalmente mucho y hacen que el generoso pagano engorde tres puntos de ego, con primeras piedras e inauguraciones cargadas de boato y fotos. Menos usual es la llegada de disponible líquido vía donación personal, callada, desconocida en el ruedo público y que se dirige directamente al núcleo deseado. Esta opción es en la que se encuadra el gesto de Josefina Díez González, que ha dejado una herencia de 59.813 euros para el asilo municipal. Y por si acaso, las monjas rectoras ya han advertido de que no se distraiga.