Ha elegido usted biodiésel
La gasolinera del supermercado Leclerc de Trobajo del Camino contará, desde hoy, con el primer surtidor de biodiésel de la provincia y el precio del nuevo combustible será el mismo que el del Gasóleo-A
El biodiésel ya está en León. No es que ya esté en marcha la primera planta de este nuevo combustible de automoción, esa llegará seguro y no tardando mucho, sino que la gasolinera del supermercado Leclerc de Trobajo del Camino será la primera que, desde hoy, ofrezca este combustible a todos los que lo deseen. El precio, a decir del gerente del centro comercial, Manuel Rilo, será el mismo que el Gasóleo-A, porque según explica su proveedor se lo está ofertando al mismo precio, en estos momentos. Hoy se procederá la llenado y a la presentación oficial del nuevo surtidor y para la ocasión el coche elegido es uno oficial, el del Ayuntamiento de San Andrés del Rabanedo, cuyo alcalde Miguel Martínez será el encargado de cortar la cinta, mejor dicho de sacar la manguera. El combustible del futuro El biodiésel, a decir de los entendidos -que no son todos los que hablan de él-, será el combutible del futuro y nunca mejor dicho; es el combustible del futuro para los coches y del futuro para la provincia leonesa, porque con la llegada de alguno de los proyectos anunciados, además de generar riqueza por sí mismos, permitirán a los agricultores diversificar lo que producen en sus campos y, sin duda alguna, comenzarán a sembrar sus campos con la materia prima necesaria para abastecer del líquido elemento a los surtidores que se pongan en marcha. En estos momentos, en España sólo hay otros cuatro surtidores que ofrecen el combustible ecológico y, las compañías pioneras en usarlo fueron la empresa de transporte público de Valencia, la compañía del tranvía de San Sebastián, Transportes Colectivos, S.A. (Bilbobus), y la empresa de transportes público de Huelva. El biodiésel es fácilmente biodegradable y, en caso de derrame o accidente, no pone en peligro ni el suelo ni las aguas subterráneas. Además, mejora la combustión, reduciendo claramente las emisiones de hollín, logrando que el humo negro y el olor desagradable, que desprenden otros combustibles, se reduzca casi un 55%.