La futura Ley de Montes creará agrupaciones de defensa forestal y un consultivo
La creación de un consejo de montes y de agrupaciones de defensa forestal son las principales novedades del anteproyecto de la ley de montes de Castilla y León, cuyo plazo para presentar alegaciones finalizó el viernes y que, en principio, ha generado cierto rechazo en propietarios privados y ayuntamientos y mancomunidades. El nuevo articulado elaborado por la Junta, institución que se ha comprometido a aclarar todas las dudas que han podido surgir a los ayuntamientos sobre la continuidad de los usos tradicionales de los montes de utilidad pública de la zona, plantea la creación del consejo de montes como órgano de carácter consultivo adscrito a la Consejería de Medio Ambiente, que tendrá funciones, entre otras, «de articulación de la participación de los sectores interesados en la definición de la política forestal regional». Miembros del consultivo Este órgano estará integrado, según el borrador de la normativa, por representantes de la Administración de la comunidad de Castilla y León, Administración del Estado, entidades locales, organizaciones agrarias, asociaciones de propietarios forestales, profesionales de reconocida cualificación y otras entidades relacionadas con el ámbito forestal. El nuevo documento, que para colectivos como la Federación de Asociaciones Forestales de Castilla y León (Fafcyle) obvia los intereses de cerca de 400.000 propietarios forestales, plantea la constitución de agrupaciones de defensa forestal con el fin de actuar de manera coordinada en la prevención de los incendios forestales. Estas agrupaciones, que tendrán personalidad jurídica propia, estarían formadas por los propietarios de montes, las entidades locales, las organizaciones profesionales agrarias y los grupos ecologistas.