Sariegos reclama desde el 2001 un colector que evite los vertidos directos al río de 2.300 vecinos
El Bernesga recibe cada día 575.000 litros de aguas sucias de Carbajal
La Junta aún no ha aprobado el enganche a León, presupuestado en 800.000 euros
Los 2.300 vecinos de Carbajal y el Alisar de Azadinos continúan vertiendo 575.000 litros de aguas sucias al río Bernesga cada día por la falta de un colector que enganche los residuos de estas poblaciones con el emisario de León capital. El problema ya fue denunciado hace cinco años por el Ayuntamiento de Sariegos, que llegó a realizar un completo informe sobre la escasa capacidad depurativa de su red ante el aumento poblacional. En el documento se explicaba que las urbanizaciones de Monteleón, El Montico, El Soto, El Hayedo, Los Acebos, Los Sauces, Los Girasoles, El Robledal y Los Llantales de Carbajal, junto con los barrios del Alisar y Caboalles de Azadinos disponían «de una red de saneamiento unitario con vertido directo al río Bernesga». También se indicaba que los restos de las antiguas fosas sépticas, fuera de servicio, tendrían «una capacidad irrisoria para atender a las necesidades de la población actual». Para solucionar ese déficit depurativo se proponía la construción de un colector que enganchara a la red de León ciudad. El primer obstáculo que encontró Sariegos para llevar adelante el proyecto fue abrir la puerta de la Mancomunidad de Saneamiento de León y su alfoz, un organismo del que estaba excluido a pesar de su cercanía a la capital. En el 2004 logró que los vertidos de Sariegos, Pobladura y parte de Azadinos se engancharan al colector de Villabalter, pero faltaba encajar también los residuos de la localidad con mayor peso poblacional, Carbajal de La Legua. Con León y San Andrés En abril del 2005, la Junta accedió a encargar un nuevo proyecto más ambicioso, de consenso con León, que llegó a sus manos el pasado noviembre, pero que aún no ha recibido el visto bueno. La obra, presupuestada en 796.000 euros, consistiría en colocar 4.660 metros de tuberías de 500 y 600 milímetros de diámetro a lo largo de la margen derecha del Bernesga hasta la calle San Ignacio de Loyola, perteneciente al término municipal de San Andrés del Rabanedo. En ese punto, San Andrés engancharía sus aguas sucias para continuar hasta el emisario de León ciudad. Al parecer, el nuevo caudal obligaría a renovar y ampliar el emisario leonés, un aspecto que aún no se ha valorado económicamente y que requerirá un acuerdo a cuatro bandas entre los tres ayuntameintos y la Junta. El alcalde de Sariegos, el leonesista Ismael Lorenzana, confía en que después después de cinco años de conversaciones, la Junta agilice el proyecto del nuevo colector para Carbajal de La Legua y, al menos, el convenio de colaboración, pueda firmarse este mismo año. El regidor considera «urgente» la conexión a la red de la ciudad para evitar «cuanto antes», según dice, la contaminación de un río que comparte con León y cuyas márgenes se han remodelado como zona de paseo peatonal. Los vertidos de Carbajal, curiosamente, están generando sanciones de la Confederación Hidrográfica del Duero.