Para mentes espabiladas

No hace falta saber mucho de química, ni siquiera tener pensado orientar los estudios por las ciencias exactas, basta con ser inteligente, despierto, y creativo, o lo que es lo mismo jóvenes con una mente preclara y espabilada. Así los quieren y eso es lo que buscan en la olimpiada química que, en el día de ayer, alcanzó su décimonovena edición y que reunió a un nutrido grupo de estudiantes de secundaria en el aulario del campus de Vegazana. La olimpiada química es un programa del Ministerio de Educación, Cultura y Deporte, que tuvo su primera edición en 1995, y que lo que busca es estimular la creatividad y el interés de los estudiantes del último año de secundaria. En este campeonato pueden participar todos los centros de secundaria, públicos y privados, que lo deseen y la iniciativa está abierta a la participación de todos los alumnos interesados, no sólo está orientada a aquellos que quieran estudiar en un futuro química. El premio El objetivo de esta iniciativa es la de premiar a los mejores estudiantes que, además, representarán a España en los encuentros internacionales de química. Para ello, las pruebas que ayer se les realizaron apelan a la lógica del estudiante, que muchas veces es la que mejor resuelve los problemas. Ahora a los profesores les tocará seleccionar a los tres mejores alumnos de todos los que se presentaron en León y en Ponferrada -en el campus del Bierzo, también ayer se celebraron las pruebas- y éstos tres, además de recibir 380, 285 y 220 euros, respectivamente, viajarán los días 22 y 23 de abril a Vigo, donde competirán con todos los ganadores de las diferentes universidades y de ahí saldrán los cuatro representantes que estarán en la olimpiada internacional, que se celebrará en julio en Corea del Sur, y en la iberoamericana de septiembre en Aveiro (Portugal).