Industria recuerda que negociar «no es obligatorio» para el Plan del Carbón

«La convocatoria de la mesa de negociación del Plan de la Minería del Carbón no es obligatoria para diseñar el nuevo plan y, por ello, es de lamentar que los sindicatos mineros estén desaprovechando esta ocasión que les ofrece el Gobierno de ser copartícipes en la elaboración del plan. Además, ya se llegó a acuerdos básicos en los asuntos más importantes en el mes de noviembre». Toda una advertencia que ayer hizo pública el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo después del desplante de los sindicatos, que no acudieron al encuentro previsto con el secretario general de la Energía, Antonio Fernández Segura, al no haber cedido el Gobierno a su intención de negociar directamente con el ministro, José Montilla. Postura inadmisible Desde el ministerio se lamentaba ayer «profundamente» que los sindicatos no hubieran acudido al encuentro. «El hecho de que anunciaran sólo unas horas antes su decisión de no acudir a la reunión ha sido recibido con sorpresa y es considerado por el ministerio una postura inadmisible para quienes están obligados a trabajar para sacar adelante un plan que garantice el futuro del sector de la minería española del carbón», apunta Industria en un comunicado. Los sindicatos mineros no acudieron ayer a la cita que tenían prevista en el ministerio con el objetivo de buscar una salida a la negociación del Plan del Carbón 2006-2012, después de que desde el Gobierno no se diera respuesta a su exigencia de negociar directamente con el ministro, por considerar que su interlocutor habitual, el secretario general de la Energía, no tiene capacidad de decisión sobre las últimas demandas de la parte social. En la reunión mantenida hace una semana UGT y CC.OO. intentaron solucionar el rifirafe entre autonomías por los nuevos criterios de reparto de los fondos mineros solicitando una partida presupuestaria adicional, de 131 millones de euros (161 según el ministerio), que se repartiría entre Cataluña, Aragón y Castilla y León (a la que corresponderían 45 millones de euros a mayores). El ministerio advirtió esta misma semana de que no habría negociación con el ministro y que no se incrementaría la partida presupuestaria pactada para los fondos mineros, que asciende a 2.880 millones de euros en siete años. Sin embargo, los sindicatos critican que el anuncio lo hayan conocido «a través de los medios de comunicación» y no se les haya informado directamente. El secretario provincial de la Federación Minerometalúrgica de CC.OO., Alberto González Llamas, señaló anoche que su sindicato ha comunicado al ministerio la necesidad de convocar una reunión urgente con el Gobierno, «con quien ellos decidan, pero que tenga realmente capacidad de decisión». En ese encuentro reclaman que se presente una «propuesta definitiva» sobre los puntos pendientes del Plan del Carbón, con el compromiso de responder «en dos o tres días» si aceptan o no la propuesta. González considera que los asuntos pendientes «se pueden corregir a posteriori», pero urgió la necesidad de cerrar ya el plan y poner en marcha las disposiciones que lo lleven a la práctica. Por su parte el secretario regional de FIA-UGT en Castilla y León, Manuel López, insistió en que «la pelota está ahora en el tejado del ministerio». «Estamos en la recta final, con el plan prácticamente cerrado, pero el reparto de los fondos por autonomías será muy complicado de cerrar sin que se comprometa una nueva partida presupuestaria. 131 millones de euros en siete años no parece una cantidad como para impedir el acuerdo», señaló el sindicalista, para quien es fundamental cerrar la negociación con «alguien con capacidad para ello, o que se la otorguen al secretario general de la Energía». López insistió en que los fondos adicionales son «irrenunciables», y si no habrá que «reabrir el proceso por el que se estableció el sistema de cálculo para repartir los fondos mineros». Los 83 municipios mineros de Castilla y León que están incluidos en el Armi (Asociación Regional de Municipios Mineros) se beneficiarán de un plan de ahorro y eficiencia energética y de aprovechamiento de los recursos de energía renovables que se materializará en medidas como la instalación de miniparques eólicos, la optimización de los servicios de alumbrado público o el control electrónico de los servicios de bombeo de agua. Así se recoge en un convenio que firmó ayer el vicepresidente segundo de la Junta y consejero de Economía, Tomás Villanueva, con el presidente de Armi, Laudino García. El Ministerio de Industria advierte en la nota de prensa hecha pública ayer de que «los retrasos en la firma pueden causar serios problemas a las comarcas mineras». Según el Gobierno, «en la actualidad ni los trabajadores ni las empresas pueden recibir las ayudas inherentes a un plan, puesto que desde el pasado 1 de enero no existe ninguno». Desde Industria se recuerda también que el anterior Plan del Carbón 1998-2005 concluyó el pasado 31 de diciembre, y por lo tanto «el retraso por parte de los sindicatos en la firma del nuevo plan está perjudicando seriamente a los trabajadores, que no pueden cobrar las prejubilaciones y las ayudas sociales; y a las empresas, que no pueden contar con las ayudas pertinentes». En opinión del Gobierno el retraso perjudica también a los territorios mineros, «que no disponen de los fondos para la diversificación de las actividades económicas». Cruce de acusaciones El ministerio asegura que «no comprende por qué reiteradamente cada semana los sindicalistas declaran a los medios de comunicación su disposición a firmar «en la próxima reunión», sin que este tipo de declaraciones se traduzcan en nada». Por su parte los representantes sindicales acusaron ayer al Gobierno de «mantener una postura de aparente deseo de cerrar la negociación, mientras que no hace nada para finalizarla». Desde CC.OO. se ha apuntado reiteradamente la posibilidad de firmar el acuerdo y definir las cuestiones que quedan pendientes en encuentros posteriores.