El Registro de la Propiedad frena el reparto de las parcelas de La Lastra Errores de comas, puntos y medidas

La urbanización de La Lastra si gue su ritmo, pero las operaciones de venta de parcelas se han visto paralizadas por el Registro de la Propiedad número 3 de León, al que pertenecen las parcelas del nuevo polígono. Según ha podido saber este periódico, a través de diversas fuentes, la registradora de la propiedad ha frenado numerosas operaciones de venta de diversas parcelas, porque se han encontrado defectos y errores en la memoria que realizó, en su día, el Ayuntamiento de León. Estas mismas fuentes explican que los defectos se refieren a que la información que aparece en la memoria de urbanización que realizaron Abalos&Herreros, por encargo del Ayuntamiento de León y que el entonces concejal de Urbanismo, Francisco Gutiérrez, presentó en enero del 2004, no coincide en numerosos casos con los datos que están contemplados en los planos originales de las parcelas del polígono ahora en construcción. Las fuentes consultadas, puntualizan que la mayor parte de estos errores no son de importancia, pero que vienen a demostrar que, a la hora de cerrar la memoria, no se revisaron todos los datos de las parcelas. A pesar de no suponer un cambio trascendental en lo que es la urbanización en sí, la registradora de la propiedad ha frenado estas operaciones y, la próxima semana, decidirá qué hacer. Dos posibilidades Así las cosas, ahora se abren dos posiblidades: o bien, la registradora decide que debe corregirse toda la memoria de nuevo, algo que tendría que hacer el Ayuntamiento, que fue quien cometió el error, o puede actuar ella de oficio y considerar que lo que vale son los planos originales y dar de paso a las licencias de venta. En palabras de las fuentes consultadas por Diario de León, todo parece indicar que el Registro de la Propiedad actará de oficio, comprobará in situ que los planos son correctos y dará de paso las ventas. Comas, decimales claro está, que no están en su sitio; puntos que bailan de lugar y medidas distintas, según se mire la memoria de la urbanización y los planos originales. A simple vista, no parecen errores graves, pero han sido suficientes para que el Registro de la Propiedad haya frenado las operaciones de venta de aquellas parcelas en los que se han producido estos errores. ¿El fallo? Pues está claro, y así lo aseguran las fuentes a las que ha tenido acceso este periódico, fue del Ayuntamiento y éste debió darse cuenta de los errores. ¿Y ahora qué? Parece que el Registro decidirá actuar de oficio y arreglarlo.