La Junta quiere obligar al uso de biocombustibles
La Junta de Castilla y León urgirá al Gobierno central para que impulse reformas normativas que hagan «obligatorio» el uso de biocombustibles en la elaboración de carburantes, con lo que se favorecería la persistencia del cultivo de remolacha en esa autonomía a partir de 2009, según recoge la Agencia Efe. Estas medidas darían cumplimiento a una directiva de la Unión Europea que pide a los Estados miembros que pongan en marcha medidas en este sentido, y que, según explicó en declaraciones a los medios el consejero de Agricultura y Ganadería de la Junta, José Valín, podría suponer la supervivencia de tres de las seis fábricas molturadoras que trabajan actualmente en Castilla y León. Valín reiteró que si no se produce esta diversificación de la actividad de las azucareras, la reforma del mercado del azúcar aprobada por el Consejo de Ministros de Agricultura de la UE provocará el cierre de al menos tres de las seis fábricas transformadoras de Castilla y León, probablemente las «pequeñas y medianas». El consejero criticó que «desde la ministra Elena Espinosa hasta el PSOE de Castilla y León niegan la evidencia porque hay elecciones el año que viene» y pretenden que «tengamos que tragar con todo lo que se dice o se niega». Fin del cultivo, en el 2009 Concretó Valín que «Azucarera Ebro no podrá seguir» produciendo a partir del 2009 porque «no tendrá remolacha» para hacerlo, ya que el precio que recibirán los agricultores por la raíz hará que declinen cultivarla. Además de la reclamación al Gobierno para que haga viable el cultivo de remolacha a través de la producción de bioetanol, Valín insistió en la necesidad de que, hasta el 2009, se articulen ayudas para que los agricultores rentabilicen sus siembras con precios competitivos. Evolución de precios Por otra parte, y según se recoge en los documentos de contratación que comparten industria y cultivadores, la evolución de los precios de referencia de la remolacha crecerán a partir de la campaña 2008-2009, cuando llegarán a los 47 euros. Entre tanto, en las dos primeras campañas de aplicación de la OCM los precios se quedarán en torno a los 42 y 44 euros.