El carril de la AP-66 afectado por el argayo puede quedar limpio en 15 días

La concesionaria de la autopista León-Campomanes ha iniciado la apertura intermitente del carril que quedó inhabilitado por una desprendimiento de tierra en el pasado mes de enero. La calzada se podría abrir totalmente durante los fines de semana o las noches, o en días festivos, cuando no haya máquinas trabajando en la recomposición de la autopista. Aucalsa espera que en dos semanas los trabajos para acondicionar la zona afectada por el argayo estarán definidas, aunque la celeridad depende de las condiciones climatológicas que acompañen a partir de ahora. Fue precisamente este elemento el que ha evitado que se cumplieran las previsiones de la empresa concesionaria, que estimó que en los primeros días de marzo podía haber restablecido el orden circulatorio en la zona. Fueron los temporales de agua y de nieve los que impidieron la reapertura del carril derecho de la AP-66 en su entrada al Principado de Asturias. Este incidente, a la altura del kilómetro 75 de la autopista de peaje, mantuvo cerrado al tráfico el tramo afectado por el desprendimiento durante dos días. Hasta el momento ya se han completado todos los movimientos de tierra, hasta el punto de haber liberado ya la ladera que se vino sobre la autopista asturleonesa.