Tercera semana con incremento notable del agua embalsada

No hay embalse entre los que gestiona la Confederación Hidrográfica del Duero que mejore el porcentaje de reserva de agua que tenía ayer tarde Riaño. Por tercera semana consecutiva, los pantanos de la provincia leonesa que vierten a la cuenca del Duero han incrementado de forma notable el nivel de agua embalsada. Lidera esa situación la presa del Esla, que alcanzó el 73% de su capacidad, por encima de los 478 millones de litros, 52 más de los que tenía en marzo del 2005. La entrada media de agua al pantano se cifró ayer en 71,5 metros cúbicos por segundo. En la montaña oriental leonesa se registraron también las precipitaciones más generosas de cuántas han caído en la última semana sobre la provincia de León. Hasta 54 litros por metro cuadrado, según los datos ofrecidos ayer por la CHD. La capacidad para almacenar agua en los valles de Riaño se ratifica con el incremento de 40 hectómetros cúbicos de agua en este pantano con respecto a la reserva registrada la pasada semana. La recuperación de agua en la presa de Las Salas hizo posible que este pantano superara ya el pasado 9 de marzo la reserva del año anterior. La tendencia anunciada en el pantano del Porma se confirmó en la actualización semanal del organismo del Ministerio de Medio Ambiente para la gestión del agua. El embalse de Boñar, que el pasado jueves estaba a sólo 4 hectómetros de la marca que tenía esa presa hace un año, igualó ayer la cifra de 195 hectómetros, que significa más del 61% de la capacidad. El crecimiento de las reservas de agua en la última semana fue más importante, sin embargo en el Luna, que tiene ahora 23 hectómetros cúbicos más que en marzo del 2005. Villameca, que tiene 6.8 hectómetros sobre 20 posibles, expone aún la situación más complicada. Crítica, casi.