La unidad del Hospital de León cumple un año con una actividad por encima de las expectativas
Más de trescientos leoneses han pasado ya por Cirugía Cardiaca
El servicio evita la derivación de pacientes cardiópatas desde hace más de diez meses
Más de trescientos enfermos han pasado ya por la unidad de Cirugía Cardiaca cuando hoy se cumple un año de su puesta en marcha. La actividad del servicio, casi similar al de las unidades consolidadas, permite desde hace más de once meses evitar la derivación de pacientes con cardiopatías graves a otras provincias. El centro, de referencia para las áreas de salud de El Bierzo y León, está elaborando una memoria de actividad de la unidad para analizar estos datos y contrastarlo con los recibidos de otras unidades de cirugía cardiaca del país. No obstante, la primera valoración es muy positiva ya que la unidad ha registrado unos índices de actividad por encima de los inicialmente previsto cuando entró en funcionamiento. Fuentes del servicio de Cardiología del centro sanitario destacan la total satisfacción con el funcionamiento de la unidad, pese a su «juventud». «No tengo ningún reparo en enviar a mis pacientes para que sean operados en este servicio. Si yo viera el más mínimo problema me retraería un poco», explica uno de los cardiólogos del centro hospitalario. El 90%, de cirugía mayor El consejero de Sanidad, César Antón, destacó hace poco más de un mes que las 240 intervenciones realizadas hasta aquella fecha por el servicio eran un logro asistencial de la actividad de la sanidad pública en Castilla y León. Según datos de este organismo, el 90% de las intervenciones de la unidad son de cirugía mayor, ejecución extracorpórea o revascularización coronaria. Por tipos de tratamiento, un 40% corresponde a revascularización, un 20% a la cirugía vascular y otro porcentaje similar a ambas técnicas. La unidad de Cirugía Cardiaca realiza una media de siete intervenciones semanales programadas; cinco en horario de mañana y dos de tarde, en quirófanos especiales. El jefe de servicio de la unidad, Mario Castaño Ruiz, explicó que la actividad se ajusta en la medida de lo posible a la demanda asistencial para evitar la lista de espera o el aumento de la demora media y lograr que ésta no supere los dos meses como máximo. Durante los primeros nueve meses de actividad, el servicio hubo de realizar ajustes en ésta para evitar que los pacientes tuvieran que esperar más de los 40 días que en un momento determinado se registró como demora máxima. En la comunidad, según los datos oficiales de la Junta de Castilla y León, un total de 82 pacientes esperaban para pasar por un quirófano para una intervención de cirugía cardíaca al finalizar el año.