Las actuaciones hasta el 2011 no contemplan estaciones eléctricas para el TAV en la provincia
El plan eléctrico del Gobierno prevé ultimar la línea Lada-Velilla en el 2008
Energía potenciará la generación eléctrica en las zonas de más consumo, en detrimento del resto
La nueva línea entre Lada y Velilla se ultimará en el horizonte del 2008, según el listado de Instalaciones Programadas en el Período 2005-2011 dentro del Sistema Eléctrico Peninsular Español, incluidas en la Planificación de los sectores e electricidad y gas 2002-2011, cuya revisión fue recientemente aprobada por el Gobierno. Dentro de estas previsiones se encuentra la instalación Lada-Velilla, con una calificación que la considera «estructural» porque «soluciona los problemas qe afectan al buen funcionamiento del sistema en su conjunto». La línea, de 400 kilovatios de tensión, tendrá una capacidad de transporte de 1.990 kilovatios en invierno y 1.820 en verano, y está aprobada dentro de las «actuaciones programadas sin ningún tipo de condicionante», por lo que no se considera un posible retraso en su ejecución. La justificación de las instalaciones considera el mallado de la red de transporte, y la evacuación de electricidad tanto procedente del régimen ordinario (centrales térmicas o de ciclo combinado, hidroeléctricas, etc.) como de las especiales, que incluyen las energías renovables. Antes de la revisión que acaba de llevar a cabo el Gobierno se preveía la entrada en funcionamiento de esta línea para el 2005. Esta actuación, que se considera una de las cuatro más importantes en la zona Norte (que incluye Asturias, Cantabria y País Vasco) pretende «facilitar la evacuación de la generación localizada en zonas excedentarias, como Galicia y Asturias, y apoyar los mercados locales». En Castilla y León no se prevé otro tipo de actuaciones de esta importancia, a parte de desarrollar las redes de generación eólica. Planificación energética La revisión de la planificación energética nacional hasta el 2011 contempla el desarrollo de las redes de transporte de electricidad y gas, y contempla las actuaciones nacionales «en colaboración con las comunidades autónomas». El documento revisado incluye también las previsiones de la demanda eléctrica y de gas en el horizonte del 2011, así como los recursos que serán necesario para satisfacerla. Así, establece las redes de transporte de electricidad que será necesario realizar, y lo hace con carácter vinculante. De cara al futuro se prevé un incremento de la demanda y una aceleración de la incorporación de las centrales de ciclo combinado y las energías renovables al mix energético; y se tienen en cuenta nuevas normativas como la repercusión del Plan Nacional de Emisiones sobre la minería del carbón, las estrategicas de ahorro y eficiencia energética o la revisión del plan de fomento de las energías renovables. Según la previsión de la evolución energética en el país, el carbón seguirá su tendencia decreciente de los últimos años en el consumo de energía final, y lo hará hasta el 2011 a una tasa media del 2,1% anual de descenso. El consumo, según el Gobierno, continuará concentrándose en los sectores de la siderurgia y el cemento, «donde no se espera un aumento de la capacidad y continuará la sustitución por otros combustibles». Por otro lado, y para planificar la red de transporte, el Gobierno calcula la demanda añandiendo la que supondrán las líneas de ferrocarril de alta velocidad y las actuaciones necesarias para el suministro a las subestaciones de tracción de los trenes que se prevé que entren en funcionamiento en dicho periodo (aquellos que a junio del 2005 «presentan alta definición y han presentado solicitud de acceso a la red»). Una revisión que no incluye las infraestructuras de los ejes contemplados en el Plan Estratégico de Infraestructuras y Transporte (Peit), que se recogerán en la planificación energética del 2006. El TAV tendrán subestaciones nuevas en Segovia y Olmedo.