La plantilla inicial será de 45 personas y la fabricación de 28 millones de comprimidos ginecológicos LA ZONA DE CONTROL LAS OFICINAS EL CORAZÓN DE LA FÁBRICA
Chemo finaliza la planta con espacio para otras siete líneas de producción
Los laboratorios prevén comenzar a comercializar sus medicamentos tras el verano
Después de dos años de obras, la gigantesca planta que han construidos los Laboratorios León Farma en el polígono de Navatejera ya está lista. En sus 4.520 metros cuadrados trabajan quince personas, a las que se sumarán en un mes los veinte especialistas que se están formando en la factoría de Liconsa (Guadalajara). Los vestuarios, el almacén, los muelles de carga y descarga, las oficinas, la zona de aguas, los laboratorios y la zona de control de calidad están preparadas para la visita de la Agencia Española del Medicamento el próximo mes de julio, que se centrará, especialmente, en el corazón de la fábrica: su línea productiva. Se trata de una cadena de siete máquinas que ocupan sesenta metros de longitud y que permitirán granular, comprimir, secar y estuchar los futuros medicamentos que llegan en polvo desde Saronno (Italia). La estrella de la línea de fabricación de los futuros comprimidos ginecológicos es un equipo Singel-pot de treinta metros de largo que llegó a la planta a finales de enero. Su don es realizar en el mismo recipiente tres operaciones, las de amasar, secar y granular el producto, con una capacidad para preparar automáticamente doscientos estuches al minuto. Cinco millones en maquinaria Según confirma el directivo Alberto Carazo, la inversión en maquinaria supera los cinco millones de euros y, aunque León Farma se pondrá en marcha con esa única línea de producción, ya está trabajando en la segunda cadena, que arrancará en el 2009. Es más, si las ventas siguen el esquema que prevén, los 28 millones de comprimidos al año iniciales podrían multiplicarse en breve por tres. Carazo reconoce que la máxima expansión de la planta leonesa será de ocho líneas, gracias a la enorme parcela que les cedió la junta vecinal de Nava, de 47.000 metros cuadrados. Salvo la urbanización exterior, que se está ejecutando actualmente, y la cantina, que abrirá el comedor el próximo 2 de mayo, el grueso de la planta, de 17 millones de euros, está rematado. Carazo estima que los primeros lotes comerciales estarán preparados en septiembre e indica que su principal cliente es americano. La planta leonesa se especializará en la salud femenina, con hormonas para combatir los efectos de la menopausia, anticonceptivos y preparados para la fertilidad. En estudio están quince productos. Los laboratorios En esta zona, media docena de profesionales controlarán que los comprimidos que se produzcan cumplen todos los requisitos exigidos para su comercialización. En la planta se ha habilitado una muestroteca para guardar una muestra de cada lote. Está junto al archivo de la empresa. Sala de ordenadores Las primeras oficinas que se han puesto en marcha están situadas junto a la recepción y al área de vestuarios. En la planta leonesa ya están trabajando quince personas. De pie, Alberto Carazo explica a un visitante el estado de las instalaciones, que aún no han sido inauguradas oficialmente. La última tecnología Los Laboratorios León Farma han invertido cinco millones de euros en su primera línea de producción, que ocupa sesenta metros de longitud y encadena siete máquinas que granulan, amasan, secan, comprimen, emblisten y estuchan los futuros medicamentos.