El coste será sufragado conjuntamente por el consistorio, Iberdrola y los propietarios del terreno
León soterrará 526 metros de línea de alta tensión en la carretera de Carbajal
El proyecto supondrá un gasto de 310.357 euros para evitar que el trazado incida en las viviendas
Los propietarios de las últimas urbanizaciones de la zona norte de la ciudad verán desaparecer 526 metros de tendido eléctrico de alta tensión que se extiende entre la carretera de Carbajal de la Legua y la margen izquierda del río Bernesga, después de que el consistorio haya llegado a un acuerdo con Iberdrola y las entidades propietarias de suelo afectadas para soterrar el tramo de trazado que más incide en las viviendas. El borrador del convenio cuenta ya con la aprobación de la comisión informativa de Urbanismo, donde se fijaron las bases por las cuales se suprimirá la línea eléctrica de 45 kilovatios, denominada Navatejera-Renfe 1 y 2, que actualmente discurre por el aire y que pasará a trasladar su energía bajo el suelo, íntegramente por terrenos de uso y dominio público de la carretera de Carbajal de la Legua y del viario y espacios libres especificados en el estudio detalle de la unidad de actuación implicada. El proceso espera ahora la aprobación por parte del Pleno municipal que se celebrará pasado mañana y que dará oficialidad al convenio entre el Ayuntamiento, Iberdrola, la Comunidad de bienes de la urbanización Sotoverde y la Junta de Compensación de la unidad de actuación Carbajal 2, para posteriormente proceder a que se inicien los trabajos de cambio de elemento de la línea eléctrico durante el transcurso del verano. El proyecto presenta un presupuesto total de 310.357 euros, al que Iberdrola deberá aportar 19.412 euros; la comunidad de bienes de la urbanización Sotoverde, una cantidad idéntica; la Junta de Compensación de la unidad de actuación Carbajal 2, 118.369 euros; y el consistorio de la capital leonesa, 153.163 euros. El pago del Ayuntamiento se resolverá gracias a los fondos que obtenga de la enajenación del 10% de los aprovechamientos urbanísticos que le corresponden en la unidad de actuación Carbajal 2, fijados en el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), lo que implicará que no se tenga que echar mano de las arcas municipales para afrontar el compromiso.