Análisis: «Algo se mueve»
La familia, o al menos así lo expresa Mónica Barrero, se muestra más satisfecha de cómo se está llevando ahora la investigación, porque, como ella misma asegura, «ahora sí se está trabajando»
En apenas mes y medio el asesino de Sheila Barrero, la joven que apareció muerta el 25 de enero del 2004 en el interior de su coche cerca de Villablino, llevará dos años y medio en la calle, sin que por el momento parezca que la investigación haya podido determinar nada concreto que sirva para esclarecer este trágico suceso. La investigación ha ido de un lado para otro, sin que las pruebas recabadas hayan servido para dar luz a un caso que el tiempo ha ido quitando de la memoria de la gente, pero no de la familia de Sheila Barrero, que han seguido luchando y trabajando para tratar de conseguir algo que les permita acabar con esta pesadilla. Mónica Barrero, la hermana de la víctima, dice sentirse ahora un poco más segura y satisfecha por cómo está llevando la investigación la nueva juez. «Ahora sí se parece que se está trabajando bien, afirma Mónica. Y es que tras casi dos años y medio y cuatro jueces distintos parece, como dice la hermana de Sheila, que «algo se mueve».