La CE estudia «nacionalizar» ayudas al vino y liberalizar la plantación
La Comisión Europea (CE) estudia poner fin a las restricciones actuales de plantación de viñas en la UE, limitadas por «derechos» y sustituir las actuales ayudas al sector del vino por un sistema en el que se asignarán partidas por países y los Gobiernos tendrán capacidad de decisión sobre los apoyos. Estas son las principales ideas de la opción preferida por Bruselas para la reforma de la Organización Común de Mercado (OCM) del vino, según un borrador, al que ha tenido hoy acceso Efe. Aboga por una reforma profunda, que podría hacerse en un paso o en dos, pero que tiene como puntos centrales la supresión de las ayudas comunitarias actuales y su sustitución por un presupuesto asignado a cada país, que los Gobiernos repartirán según sus preferencias, según el documento, que aún no es definitivo. Además, la CE estudia también la liberalización de las plantación de viñas pero baraja dos plazos, según la reforma sea de una o dos fases. En una modificación de un solo paso, terminarían las restricciones a la plantación o «de inmediato» o en agosto de 2010, de manera que la limitación para cultivar viñas fuera solamente «de facto» a causa de los requisitos que se mantendrían para los vinos con denominaciones de origen. En este caso, también desaparece el sistema de arranque y al no haber gastos por esta medida, los servicios de la CE consideran que habría más dinero para los sobres nacionales. La reforma de «dos pasos» se parecería a la OCM del sector del azúcar y mantendría las restricciones o derechos de plantación hasta 2013; prevé ajustes para estimular el arranque de viñedos con el fin de que cesen la actividad los viticultores menos competitivos. Para ello, la CE baraja primas «atractivas», graduales, que irían reduciéndose cada año, con el objetivo de arrancar 400.000 hectáreas en la UE en un período de cinco años con una ayuda máxima de 2.400 millones.