«Si los impositores no votan, que se preocupen los candidatos»

Victorino González Ochoa sólo se refirió ayer en Vitoria brevemente al proceso electoral que vive Caja España, que le llevará a renovar los cargos en la asamblea de los grupos de empleados, entidades fundadoras y entidades de interés general, pero que tiene en el grupo de impositores el centro de la pugna electoral. El presidente comentó que el proceso electoral «está transcurriendo con total normalidad», y no quiso comentar nada al respecto de las cinco candidaturas presentadas. Sobre el escaso interés que parecen mostrar los impositores que por sorteo tienen derecho a votar, González sólo indicó «No sé por qué será, pero los que deben preocuparse son los candidatos. Yo sólo me he preocupado de dar estabilidad a la caja, y de intentar lograr los mejores resultados, y esos dos objetivos se han logrado. Me siento satisfecho por ello, por lo conseguido, pero yo no me presento a estas elecciones, y no tengo nada que decir al respecto». Tampoco quiso entrar a valorar a los distintos candidatos que se presentan a estas elecciones: «No tengo favoritos», indicó. Sin nostalgia Victorino González Ochoa aseguró también que no tiene ningún sentimiento de nostalgia por el hecho de estar presidiendo los últimos actos públicos al frente de Caja España: «Sólo puedo decir que hemos cumplido lo que nos habíamos propuesto, y eso es lo importante». El presidente de la entidad financiera con sede en León centró sus explicaciones en los objetivos que busca Caja España en su incursión en el mercado vasco, más allá de la intención de abarcar todo el mercado peninsular. «Las familias y los empresarios forman parte de la estrategia de negocio de la caja, y nosotros venimos a Euskadi a hacer negocio». Reconoció que el vasco es un mercado «dinámico, pero agresivo», y confió en que la oferta de Caja España genere el «suficiente clima de confianza y competencia». Por su parte el director general, José Ignacio Lagartos, recordó a clientes y empresarios las principales cifras de la entidad, que cuenta con unos recursos a clientes de casi 18.000 millones de euros, y un nivel de créditos de 12.000 millones, lo que supone un incremento del 20%. El resultado atribuido al grupo creció casi un 47% el año pasado, hasta los 31,3 millones.