El contagio a humanos de enfermedades de animales cae a registros mínimos

La reducción del contagio de humanos de enfermedades que afectan a los animales parece proporcional al efecto de las campañas de saneamiento ganaderos que llevan a cabo los servicios veterinarios oficiales. Ejemplo del retroceso en los contagios se observa en los casos declarados de brucelosis en humanos, que se redujeron a la mitad en el último año. En la provincia de León nueve personas sufrieron esta enfermedad transmitida desde focos registrados en animales, con una tasa de incidencia registrada de 1,83 casos por cien mil habitantes. Otra enfermedad con origen de contagio en el mundo animal que se han registrado en humanos es la hidatidosis, con tres casos en la provincia, y una tasa del 0,61 por cien mil habitantes. No llegó a testimonial la rabia, de la que no se registraron casos entre humanos. Los descensos se aprecian ya en la comparación con los casos de contagios de este tipo de enfermedades que se dieron entre el 2000 y el 2001 en la provincia leonesa. En ese año se produjeron 15 casos de brucelosis entre humanos, con una tasa de 2,96 por cada cien mi habitantes; o seis transmisiones de hidatidosis a humanos, lo que representaba una tasa poblacional del 1,18 casos entre cien mil habitantes. Los contagios de tularemia se reflejaron entonces con una tasa del 0,20 casos por cien mil habitantes. La reducción de los contagios, que representa en algunas enfermedades supera el 30% con respecto a los registros de las transmisiones que existían hace cinco años. El retroceso es paralelo en los casos localizados en la cabaña ganadera. La combatividad de la administración ha dado como resultado que el porcentaje de positivos de brucelosis entre la cabaña ganadera leonesa no llegue al 0,50% del total, cuando a finales de la década de los noventa se disparó en algunas campañas de saneamiento hasta el 4 y el 5%. La positividad de enfermedades en animales que se transmiten con frecuencia a los humanos se reduce en la actualidad a casos aislados: en las últimas campañas el número de animales ovinos afectados por brucelosis rondó el millar y medio. En la cabaña vacuna, no llegó al medio millar. La vigilancia epizootiológica se establece a través de controles para la erradicación de la brucelosis, la tuberculosis y la leucosis en las explotaciones bovinas. En todos los casos, la reducción de positivos en las campañas de saneamiento ha sido progresivo. La incidencia de la brucelosis en humanos alcanzó en España 312 casos de afectados a lo largo del año 2005. En el 2004 los casos declarados fueron 636.