Otra huelga de los técnicos del hospital retrasa los análisis y las pruebas

El sindicato UGT denunció ayer «presiones y amenazas veladas» al personal del Hospital de León para que no secunde las sesiones de paro convocadas para toda la semana en protesta por el reparto de los incentivos y las dictadas por los técnicos sanitarios en demanda de la homologación de sus títulos con los compañeros del resto de Europa, una huelga de 24 horas de duración. No obstante, según el sindicato, ayer el seguimiento de las movilizaciones fue del 100% entre los técnicos superiores, cercano al 85% en el resto de las categorías laborales no sanitarias del centro sanitario y entre un 40 y un 60% en el resto de los grupos laborales. José María González, vicepresidente de la Asociación Española de Técnicos de Laboratorio, destacó los servicios mínimos abusivos que superaron el 50% de las plantillas en todos los laboratorios del centro sanitario leonés. No obstante, pese a ello el seguimiento del paro (de 22.00 horas del lunes a 22.00 del martes) fue de todo el personal provocando retrasos y suspensiones en pruebas no urgentes. En concreto, explicó, de Anatomía Patológica o Análisis Clínicos no saldrá ningún informe aunque se realice el trabajo necesario para poder conservar las muestras y no estropearlas. González, portavoz de los técnicos, explicó que las medidas de protesta se endurecerán sino existe una respuesta clara que permita el incremento de la carga lectiva de sus titulaciones para adaptar sus títulos al resto de Europa. Sanitarios Nicolás Sanz, responsable de organización de la central sindical, explicó que prácticamente todos los trabajadores no incluidos en unos «servicios mínimos abusivos e impuestos» siguieron el paro convocado para una hora de cada turno, una convocatoria que se repetirá durante toda la semana en todos los centros hospitalarios de la comunidad y que se radicalizará con el mantenimiento de las protestas si no existe una propuesta en forma de negociación por parte de la administración sanitaria. «Con estas movilizaciones no exigimos una subida retributiva sino un reparto equitativo de los incentivos», indicó Sanz en una rueda de prensa en la que acusó a la Junta de intentar confundir a los usuarios negando el objetivo de los paros. «No vamos a ceder hasta que no haya justicia porque no estamos ante una reivindicación de dinero sino de justicia», recalcó. El sindicato, con el respaldo de CSI-CSIF reclama una negociación que garantice el reparto de los pluses por reducción de las listas de espera, algo más de 15 millones de euros para todo el personal sanitario de la comunidad, entre todas las categorías laborales y la compensación para las más bajas que no han recibido pago en los dos años de vigencia del plan de reducción de las demoras. La responsable de sanidad del sindicato, Carmen Ámez, exigió la dimisión de todos los responsables del reparto de incentivos por su manifiesta y citó expresamente a la gerente de salud porque asumió «lo injusto del reparto y que rayaba en la ilegalidad y no da una respuesta a personas que llevan más de treinta días encerrados», precisó. En sus críticas, Ámez aludió al consejero de sanidad a quien tachó de incompetente y de favorecer a la sanidad privada en detrimento de la pública. La responsable ugetista denunció un aumento «bestial» en los conciertos con la sanidad pública, «que llega al 30% en los últimos cuatro años» y las peonadas que «se pagan sólo a unos pocos». En este sentido, Nicolás Sanz denunció un acuerdo subterráneo con el sindicato CESM para hacer el reparto de los incentivos excluyendo al resto de las categorías laborales. Nuevos paros Los trabajadores del Hospital de León están llamados hoy a una nueva sesión de paros puntuales, de una hora de duración en cada uno de los turnos. Las protestas, coincidentes con una concentración de personal, comenzarán a las 8.00 de la mañana y se prolongarán hasta las 9.00 en el turno de mañana; por la tarde se parará de 16.00 a 17.00 horas y de 22.00 a 23.00 en el turno de noche. Las protestas se prolongarán hasta el viernes y el encierro de delegados sindicales, que cumple hoy cuatro semanas, seguirá de forma indefinida.