El 8% de las personas que ingresan en un hospital sufren efectos adversos

Ocho de cada cien personas que ingresan en un hospital sufren algún efecto adverso vinculado al ingreso, los cuidados o la medicación que reciben. El estudio, realizado en una veintena de centros hospitalarios con más de cinco mil pacientes, indica que las tres principales causas de efectos adversos en los hospitales están relacionados con el uso de los medicamentos (37,4%), las infecciones hospitalarias (25,3%) y con la aplicación de procedimientos quirúrgicos (25,04%), especialmente los que requieren anestesia. Estos perjuicios y los vinculados a los cuidados (el 7,3%) podrían haberse evitados al menos en la mitad de los casos, especifica el estudio. El resto de los perjuicios derivados de la hospitalización se vinculan al diagnóstico y a la enfermedad que padece el paciente que hacen imposible evitar las complicaciones. Para realizar este informe, avalado por el Ministerio de Sanidad y Consumo, se realizó un seguimiento de más de cinco mil pacientes ingresados en junio del pasado año en los hospitales españoles durante su estancia en el centro y un mes después del alta. El objetivo final es poder realizar una estrategia que mejorase la calidad de la asistencia en los centros hospitalarios y potenciar el conocimiento de los efectos adversos para contribuir a su eliminación. Las hemorragias o hematomas relacionados con una intervención quirúrgica son los efectos negativos derivados de un ingreso con mayor relevancia, se presentan en el 9% de los casos en que hay complicación, que son ocho de cada cien ingresos. Le siguen, por número de complicaciones, la infección de la herida quirúrgica (causa de efecto adverso en el 7% de los casos), la infección en el tracto urinario adquirida en el propio centro hospitalario, la aparición de náuseas, vómitos o diarreas derivado de la medicación, las alergias a los fármacos o la úlcera de presión por falta o mal cuidado. Efectos graves: 16% En cuanto a la importancia de los efectos adversos, el informe recalca que el 45% de éstos son leves, el 39% moderados y el 16% graves; en un 4% de los casos estudiados se produjo un fallecimiento. La aparición de infecciones generalizadas, la hemorragia interna o lesión de un órgano durante la intervención, un infarto de miocardio o un accidente cerebrovascular son los resultados negativos más graves en los estancias hospitalarias. Las consecuencias más comunes de estos efectos adversos son la prolongación de la estancia hospitalaria, que tuvo lugar en uno de cada tres casos y que alargó la estancia cuatro días de media, y la necesidad de un nuevo ingreso tras haber obtenido el alta, algo que llevo de nuevo al hospital a uno de cada cuatro pacientes con complicaciones. Estos pacientes pasaron, de media, siete días en su segunda visita al centro hospitalario. Edad y factores de riesgo El complejo informe revela que la edad actúa como agravante para la existencia de efectos adversos ya que la edad media de los hospitalizados con complicaciones es de 65 años, y se especifica que en los mayores de esa edad la posibilidad de consecuencias negativas vinculadas a una hospitalización duplica a la existente en los menores de esas edad. Además se observa que factores de riesgo previos multiplican por tres la posibilidad de que se produzca una complicación, evitable o no, de la estancia. El tamaño de los hospitales también juega en contra de los efectos contraproducente, los pacientes que ingresaron en un hospital pequeño tienen un 20% más de posibilidad de efecto adverso. El Ministerio de Sanidad define efectos adversos como todo accidente impresvisto e inesperado que ha causado lesión y/o incapacidad y/o prolongación de la estancia en el hospital que se deriva de la asistencia sanitaria y no de la enfermedad del paciente. El número en España es, según el departamento ministerial, similar al que se registra en países como Francia o el Reino Unido con lo que a juicio del departamento se puede establecer que los hospitales españoles se encuentran a un altísimo nivel en el campo de la calidad asistencial. El informe cuenta con los datos recogidos en 24 hospitales, elegidos por unas características que hacen sus datos extrapolables al conjunto de la red. En Castilla y León, el complejo hospitalario de Salamanca participó en la eleboración del documento. Consecuencia Porcentaje Hemorragia o hematoma relacionado con una intervención 9,3% Infección de herida quirúrgica 7,63% Infección del tracto urinario nosocomial 6,87% Náuseas, vómitos o diarreas por fármacos 4,89% Prurito o lesiones dérmicas por medicamentos 4,89% Otros efectos secundarios de los fármacos 4,43% Úlcera por presión 3,66% Lesión en un órgano durante la operación 3,05% Quemaduras, erosiones y contusiones 2,90% Shock séptico 2,90%