Amilivia conoce a los prácticos

El alcalde de León, Mario Amilivia se reunió en la mañana de ayer con los jóvenes de prácticas de todos los medios de comunicación de León en un desayuno informal que tuvo lugar en el hotel Conde Luna. Este encuentro se caracterizó por la cordialidad y a lo largo del mismo uno de los prácticos le propuso en tono de broma hacer una cena financiada por el Ayuntamiento con todos los jóvenes que trabajan en los medios leoneses este verano, ya que el beneficio de la misma repercutiría positivamente en el sector de la hostelería leonesa, ante lo que el alcalde dijo que pensaría la propuesta si le presentaban un informe presupuestario. Una vez finalizado el desayuno, Amilivia hizo un repaso de lo que había sido su labor política al frente del consistorio leonés desde que asumió la presidencia de mismo tras la moción de censura «después de 18 meses de gestión ineficaz», en alusión al anterior gobierno del PSOE. Tuvo duras palabras para el partido de la oposición, del que criticó la puesta en marcha del Máster de Tenis, que trajo hasta León a tenistas de la talla de Nadal o Verdasco; la adjudicación de los terrenos de los hospitales por un valor, según ellos inferior al del precio de mercado; y la venta del patrimonio de La Lastra. Y temas ya recurrentes en la política del alcalde popular como la crítica al Gobierno central por la ausencia de contestación para construir el palacio de congresos, la restauración de Puerta Castillo o la solución al cruce de Michaisa fueron también tratados ante los futuros periodistas. Papel de León en el Estatuto A pesar de no aclarar si se presentará en la cabeza de lista del Partido Popular para la alcaldía de León en las próximas elecciones municipales, Amilivia, en un tono con tintes electorales, dijo que su planteamiento «es ser popular entre los leoneses, no entre los constructores». Amilivia también habló sobre el nuevo Estatuto de Autonomía de la comunidad y lo valoró positivamente, ya que «implica que Castilla y León asuma más competencias y reciba más financiación». Del mismo modo, declaró que «Castilla y León tiene que asumir como identidad propia la lengua española, que es hablada por 400.000 personas» y que la comunidad debe «hacer bandera del español», sin mencionar la recuperación del leonés en el texto final. En cuanto a la ciudad de León, dijo que había «entregado su identidad