La UPL pide la mediación del alcalde para ubicar el Museo del Ferrocarril
El grupo de concejales de la Unión del Pueblo Leonés ha presentado una moción en la que solicita al Ayuntamiento que proponga, en la reunión del Consejo de Administración de la Sociedad León Alta Velocidad 2003, S.A., como parte integrante de dicha sociedad, que se tome el acuerdo de adoptar las medidas precisas para fijar definitivamente la ubicación del Museo del Ferrocarril bien en el barrio de La Sal o bien en la actual Estación de Clasificación, opción que, según los leonesistas ya ha sido descartada por la Sociedad León Alta Velocidad. La UPL también exige que se designe de manera provisional un espacio que reúna las condiciones de seguridad y conservación para el material histórico ferroviario que actualmente se encuentra en León, durante el tiempo que duren las obras. El portavoz de la UPL, Luis Herrero Rubinat, recordó que el Ayuntamiento forma parte de dicha sociedad que controla el proyecto de ordenación y urbanización de todo el suelo liberado con la integración del ferrocarril a su paso por la capital, con una superficie de 1,5 millones de metros cuadrados, «superficie suficiente para no tener problemas a la hora de reservar un espacio para instalar el Museo de 10.000 metros cuadrados; espacio que no alcanza ni el 0,7% total del suelo liberado», explicó el edil leonesista. Luis Herrero recalcó que en la ciudad de León se conserva material ferroviario «de un altísimo valor histórico que puede peligrar y desaparecer si no se pone remedio». Añadió que se trata de un patrimonio ferroviario de los más importantes de España «que se conserva gracias al trabajo de un grupo de personas reunidas en torno a la Asociación de Amigos del Ferrocarril, a quienes hay que reconocerles el esfuerzo imponderable». Rubinat también incidió en que ninguno de sus miembros percibe «un solo euro por su trabajo ni por su tiempo». Rubinat expuso que un buen lugar para su ubicación sería el barrio de La Sal donde actualmente se encuentran los talleres y depósito de máquinas de Renfe. Asegura que para la instalación de este Museo sólo «sería necesario ocupar una parte del terreno liberado en dicho lugar y no habría necesidad de acometer prácticamente ninguna obra».