Valdescorriel distingue a Diario de León por su primer Centenario

La localidad zamorana de Valdescorriel, próxima a Valderas, hizo entrega ayer de las espigas de oro, galardón con el que se premia la trayectoria vital o empresarial de los galardonados. Tras la presentación del acto por parte de José García (Pepín), intervino Tomás Casado y fueron entregados los galardones. Al director del Diario de León, Fernando Aller, la Espiga de Oro Regional con motivo del Centenario del rotativo, la Espiga de Oro Local a Joaquín Barrera, una persona que nació en el pueblo y que trabaja en Tarragona, pero que ha mantenido vivas sus raíces. Fueron entregados diplomas a los abuelos del año, Ana María Argüello y Antonio Marbán, y el Premio al Carisma fue entregado a Cirilo Lera En el acto, celebrado en la Iglesia de la localidad, cuya restauración resulta modélica, el presidente de la Asociación Santa Marta y mecenas de la localidad, el empresario Tomás Casado, se refirió a los galardonados, y mostró su deseo de que los medios de comunicación tengan la oportunidad de dar buenas noticias más a menudo. También intervino el directivo de El País José Grajal, que ensalzó la trayectoria de Diario de León, su apuesta continuada por la información de calidad y su aportación al desarrollo de la provincia y la región. Fernando Aller tomó la palabra a continuación para agradecer el premio en nombre propio y en el del periódico que dirige. «Es verdad -dijo Fernando Aller en su intervención- que nos unen vínculos muy estrechos de vecindad a zamoranos y leoneses, cierto que compartimos también una historia común a través de los siglos y no menos verdad es que a este lado y al otro de la divisoria provincial, zamoranos y leoneses luchamos por una supervivencia rural ciertamente difícil. Aquí, gracias al empuje de la Asociación y fundamentalmente de un hijo de la tierra, Tomás Casado, ustedes tienen el privilegio de constituir un pueblo ejemplar, un modelo a seguir». «Los cambios económicos de las últimas décadas -continuó- están provocando la despoblación de nuestro territorio y el empobrecimiento de nuestras respectivas provincias. Nos hacen falta muchos Tomás Casado para poner las condiciones que impulsen el desarrollo de nuestros pueblos, para dejar de ser provincias que viajan en el vagón de cola de este tren que ya avanza a velocidad de crucero por los raíles del siglo XXI. ¿Se imaginan ustedes que tantos leoneses y zamoranos ilustres como existen, que han triunfado en la empresa o en los ámbitos culturales y políticos, hicieran por cada lugar en el que nacieron lo que Tomás Casado ha hecho y está haciendo por Valdescorrriel?... Pues sencillamente, que ni Zamora sería Zamora ni León sería lo que hoy es León». Concluyó Fernando Aller con estas palabras: «Luciré con inmodestia esta espiga que ustedes me entregan y allí donde vaya explicaré con orgullo: Este es el símbolo de la ilusión, del esfuerzo en común, de la generosidad de unos hombres que luchan para que un pueblo no muera, del amor a la tierra en la que se nace y a la que desde la distancia se añora, es el emblema del mecenazgo que nace del corazón, la alegoría de la fraternidad ... Es el símbolo, en definitiva, de Valdescorriel».