Los vecinos desconocen a los premiados
No es Navidad, no son los grandes sorteos de cada año. El calor sustituye al frío y la piscina a las bufandas y a las pistas de esquí. Por eso, a pesar de que una parte del primer premio de la Lotería Nacional ha sido vendido en al Administración de Loterías y Apuestas del Estado número dos de San Andrés, en el barrio Pinilla, ni siquiera los regentes del bar que están al lado tenían conocimiento de que la suerte había llegado hasta apenas unos metros de su establecimiento. Dicen que no ha habido celebraciones por la mañana, que no conocen a ningún premiado y que ni siquiera sabían que parte de los décimos premiados habían sido vendidos en el municipio. Por lo tanto, ni brindis, ni champán para celebrar la parte de los 600.000 euros que ha llegado desde el Órbigo hasta San Andrés. Nadie sabe nada El total desconocimiento del sorteo de Benavides y del hecho de que el premio haya recaído en el barrio de Pinilla reinaban la tarde de ayer en este populoso barrio de San Andrés. El frutero de un establecimiento cercano a la administración de loterías confesaba que se había enterado «por la prensa» de que había tocado el premio allí. Más concretamente porque varios periodistas se habían pasado por el supermercado en el que él trabaja durante toda la mañana para tratar de encontrar al dueño de la administración, Cayetano Martínez, que parecía haber desaparecido. «Ya han venido de la radio a preguntar por aquí, pero no sabemos nada», eran las palabras del frutero ante la insistencia por encontrar la pista del repartidor de suerte que, probablemente, habrá mejorado las vacaciones de más de un vecino de San Andrés.