| Reportaje | Con el fuego al cuello |
Las llamas devoran más de treinta hectáreas en La Robla
El miedo asedió a los vecinos de la zona que tras ver por televisión el desastre gallego se asomaron a sus ventanas para contemplar una extensa columna de humo
En la imagen el helicóptero que participó en la extinción
El paraje conocido como la Mata Nueva ubicado entre los montes de Llombera y Rabanal, se vio afectado ayer por un gran incendio que arrasó cerca de 30 hectáreas de roble y monte bajo. El espectacular humo que surgió del fuego causó una gran conmoción en la comarca, aunque las brigadas de la Junta y el helicóptero con base en Camposagrado subsanaron con bastante celeridad el problema. Sin embargo, debido a las ráfagas cortas de viento, el fuego se iba extendiendo cada vez más, haciéndose necesaria la intervención en las labores de efectivos de la Vecilla, Sahechores y Pandorado, además de la gran labor de la cuba autobomba del Ayuntamiento de la Robla y de los efectivos de la Policía Local de la Robla. El miedo existía pero en todo momento estuvo controlado y alrededor de primera hora de la tarde el fuego quedó totalmente sofocado. A las 17.00 horas se iniciaron las labores de liquidación. Aunque la extinción circuló por los cauces normales hubo quejas por parte del alcalde de Matallana de Torío, José María Manga, quien denunció «la no previsión de la Junta de haber construido retenes en puntos tan cercanos al nacimiento del fuego, criticando además que sin «ningún tipo de autorización ni permiso por parte de este Ayuntamiento, el helicóptero de extinción recogió agua de las piscinas públicas, estando éstas repletas de bañistas. No niego la colaboración, sólo cuestiono las formas», precisó José María Manga, alcalde de Matallana de Torío.