León apaga Galicia Tabares, en La Venatoria

Están curtidos en la extinción de incendios, pero la experiencia no les resta ni un ápice de respeto por el fuego. Los efectivos de las dotaciones León desplazados desde el martes día 7 a Galicia, y que permanecieron en tierrras gallegas hasta el día 16, para colaborar en la extinción de las decenas de incendios que asolaron esa comunidad autónoma se han sorprendido de la «mala intención» con la que han sido provocados, cerca de poblaciones y, en ocasiones, cortando el paso en el bosque de los equipos antiincendios. Esta circunstancia, explica, dificulta las tareas de extinción de los fuegos y eleva el riesgo de los mismos. Los equipos de extinción de incendios deben «centrarse en defender las poblaciones, y en el momento de atender el monte, el fuego está ya muy extendido». Sorpresas desagradables Incluso se han encontrado con sorpresas desagradables cuando participaban en la extinción de incendios en el monte gallego. Por ejemplo, el pasado domingo algunos equipos observaron «cómo aparecían por su espalda nuevos puntos de fuego», focos «que no son secundarios y normales» en el desarrollo de un incendio, y que obligaron a los efectivos castellanos y leoneses a buscar rápidamente «rutas de escape» para evitar quedar atrapados por el fuego. A ello había que sumar otras dificultades que se han ido econtrando, como la sequedad de los bosques, propiciada por la ausencia de precipitaciones y la sequía, y el fuerte viento que durante todos esos días azotó a Galicia y que contribuyó a la expansión de las lenguas de fuego que carbonizaron con violencia y rapidez su superficie. Según las últimas estimaciones, el fuego ha lamido más de 80.000 hectáreas de la comunidad gallega, dejando a su paso un rastro humeante, gris de ceniza. Los efectivos desplazados desde León trabajaron en la extinción de incendios en dos de las cuatro provincias gallegas: Pontevedra y La Coruña. Los equipos han trabajado tanto de forma autónoma, ocupándose al completo de la extinción de fuegos, como de manera integrada en un dispositivo activado por la Xunta de Galicia. Movilización de efectivos La Junta de Castilla y León movilizó durante esos once días a equipos de trabajo prcoedentes de todas la provincias de la comunidad, pero sobre todo el equipo de tierra, de a pie, el que apagaba y se fajaba con todos y cada uno de los incendios estaba principalmente formado por brigadistas leoneses. Las brigadas forestales de León ha sido las únicas que se enviaron a Galicia como equipos de trabajo completo para asumir la dirección y la extinción de los incendios forestales en su conjunto. Su sistema de trabajo ha consistido en trabajar en un fuego hasta que este quedara totalmente extinguido, liquidado y rematado. Los relevos establecidos permitieron que cada día hubiera, al menos, 50 profesionales trabajando en la extinción de incendios forestales en Galicia. Concretamente en las provincias de Pontevedra, Orense y A Coruña, han participado 226 profesionales de las brigadas forestales, a los que hay que sumar las dotaciones enviadas desde la Agencia de Protección Civil e Interior de la Junta de Castilla y León y las unidades de bomberos enviadas por las diputaciones provinciales de Valladolid, Ávila y Salamanca. Estos efectivos se han integrado con las brigadas forestales organizadas por la Consejería de Medio Ambiente para luchar contra los fuegos que asolaron durante los últimos días la comunidad gallega. En concreto, se enviaron, por parte de las brigadas forestales 16 técnicos, 21 agentes medioambientales, 16 autobombas, 16 cuadrillas de tierra, tres cuadrillas helitransportadas y personal de apoyo (conductores y otros). En Pontevedra y La Coruña Los brigadistas leoneses contribuyeron, con su trabajo, a sofocar numerosos incendios, en diferentes lugares, todos ellos en las provincias de Pontevedra y La Coruña. En concreto, los lugares en los que se estuvieron trabjando desde el día 7 hasta el 16 de este mismo mes, han sido As Neves, en el término municipal de La Cañiza (Pontevedra); Porriño, Puentecandelas, Lourizan, A Lama y A Pobra do Caramiñal, todas ellas también en el término de la provincia de Pontevedra; y, además, también colaboraron a sofocar los incendios de Lousame en La Coruña. La berciana Pilar Tabares ejerció ayer de pregonera de las fiestas de La Venatoria que, hasta el próximo día 3 celebrará sus tradicionales festejos que, este año, cuentan con el aliciente de coincidir con los actos que está celebrando con motivo de su Centenario. Pilar Tabares, que asegura sentirse muy unida a la provincia de León, agradeció la invitación e invitó a todos a disfrutar de los festejos.