Penas ve aspectos positivos, pero califica de «escasa» la reforma

«La nueva reforma clarifica aspectos nefastos de la antigua LOU, pero es escasa, porque la modificación de esta normativa debería haberse realizado con mayor profundidad». Con esta afirmación, el rector de la Universidad, Ángel Penas, definía la Ley Orgánica de Universidad, que ayer fue remitida por el Consejo de Ministros al Parlamento, para iniciar su debate en las Cortes Generales. Ya el pasado mes de julio, en declaraciones a este periódico, Penas exigía más dinero para poder hacer frente a esa autonomía que otorgará la nueva norma a las univesidades. «La autonomía sin financiación es lo mismo que un jardín sin flores», puntualizó entonces el rector de la Universidad de León, quien entiende que las modificaciones de las leyes implican muchos cambios para los que son necesarios -según sus palabras- fondos económicos. Además, echa de menos dos aspectos: una regulación más estricta para las universidades privadas, «a las que no se les exige lo mismo que a las públicas», puntualizó, y la interrelación entre todas las comunidades autónomas, puesto que a su juicio la autonomía universitaria queda «constreñida» cuando el proceso pasa por acuerdos que luego decidirá cada autonomía, «sin que exista relación entre ellas, algo que no se entiende cuando de lo que se trata es de conseguir un sistema universitario único y, ahora, también europeo», finalizó el rector Ángel Penas.