La fiesta de Ugal inicia la promoción de productos artesanos del campo
El sindicato Ugal espera que alrededor de cinco mil personas participen desde este mediodía en la fiesta campesina que organiza esta asociación agraria desde hace 25 años. Veguellina de Órbigo acoge la presente edición de la convocatoria, que trata de ser un referente festivo y de reivindicación para las familias campesinas de la provincia. La novedad de este año está en la promoción de los productos artesanos que elabora la gente del campo leonés, entre los que se incluyen género de alfarería, lácteos, derivados de la miel, cárnicos o cremas y mermeladas. Esta vertiente promocional de la fiesta campesina se ampliará en sucesivas ediciones, según confirmó el secretario general del sindicato, Matías Llorente, que avanzó en la presentación del evento que a partir del próximo año la cita se desarrollará durante dos jornadas, con la inclusión de una feria de productos artesanos desde la inauguración. «Queremos desarrollar la promoción de los productos artesanos que se producen en el campo leonés, ahora que parece que desde algunas administraciones sólo se mira una parte de este negocio y se ha abandonado a quienes tienen en sus manos la materia prima para desarrollar de verdad el campo leonés», admitió Llorente. Los expositores acompañarán en el recinto de Veguellina de Órbigo que se ha elegido para asentar la fiesta campesina un amplio programa lúdico y reivindicativo, que tendrá como acto central la intervención del secretario general (a partir de las seis de la tarde) y la entrega de distinciones a profesionales del sector: remolacheros, ganaderos y entidades colaboradoras con el sindicato. Como incentivo, es tradición que Ugal sortee un ternero valorado en 500 euros entre todos ganaderos o agricultores que hayan tramitado las ayudas europeas a través del servicio asesor del la organización. El programa de la fiesta campesina incluye este año también representaciones de teatro de calle, que se une a los juegos tradicionales leoneses. El menú de la comida de confraternización estará formado por ternera asada a la brasa y vino de la tierra. A partir de mediodía comienzan los actos en los que este año no hay invitados políticos ni autoridades como en ocasiones anteriores, como el precedente, con presencia ministerial.