La modernización de 2.900 hectáreas en el Páramo Alto costará 19,7 millones

El Ministerio de Agricultura aprobó ayer el Proyecto de Mejora y Modernización de los Regadíos del Sector V de la Comunidad de Regantes del Canal del Páramo, que contará con un presupuesto de 19,75 millones de euros. Las obras afectan a 2.891 hectáreas pertenecientes a los municipios de Bustillo del Páramo, San Pedro Bercianos, Laguna Dalga, Santa María del Páramo y Urdiales del Páramo. El objetivo de estas obras de mejora de los regadíos, incluidas en el Plan de Choque contra la sequía firmado hace unos meses por los ministerios de Medio Ambiente y Agricultura, es el ahorro en el consumo de agua. Para ello, se sustituirá el actual sistema de riego por canales abiertos, mediante los que se distribuye agua en la cabecera de las parcelas, por un nuevo sistema consistente en una red de tuberías subterráneas que llevan el agua con presión a las fincas. El proyecto incluye la realización de obras de toma, instalando una estación de bombeo, red de distribución, instalación eléctrica de alta y baja tensión, así como el sistema de automatización del riego. Estas obras forman parte de los proyectos que, en materia de regadíos, lleva a cabo el Ministerio de Agricultura a través de Seiasa del Norte en la comarca del Páramo. El sector VII, en pocos días Según señaló el presidente de la Comunidad de Regantes del Canal del Páramo, Ramón Ferrero, en pocos días se aprobará el proyecto del Sector VII, que incluye otras 3.000 hectáreas aproximadamente. «Yo creo que para el 21 de septiembre que hay reunión del consejo de administración de Seiasa esté también aprobado», afirmó Ferrero. En cualquier caso ambas obras, la del Sector V y la del VII, deben estar adjudicadas este año y totalmente terminadas en el 2008. Las obras citadas son de vital importancia para una comunidad de regantes que se abastece con el agua del pantano de Barrios de Luna y que tantos problemas ha tenido y está teniendo para sacar sus cosechas adelante por la escasez de agua. Además, las nuevas infraestructuras permitirán un aumento de las cosechas, el ahorro en el consumo de energía y fertilizantes y una disminución importante de las horas de trabajo anuales por hectárea.