«Una simple interpretación da lugar a esto»

Ramiro Hidalgo, letrado de la defensa de Victorino Alonso, manifestó a la conclusión del juicio la dificultad de juicios de estas características «porque estos temas son muy técnicos y a veces una simple interpretación de las partes o simplemente optar por soluciones diferentes, da lugar a estas situaciones. Lo que se ha ventilado hoy es que las defensas hemos aconsejado al administrador real que se conformase con una pena ínfima que ha solicitado el fiscal, que no comporta prisión, porque no reúne las condiciones para ingresar en un centro penitenciario, y a partir de ahí, el fiscal ha indagado en la verdadera personalidad del representante real de la sociedad. Todos los testigos de la fiscalía han puesto de manifiesto que no tenía relación con esta empresa y que no procedía una acusación contra él». Retirada la acusación y los cargos de la acusación particular «no procede continuar con un juicio en el que muchos pensábamos que no debería de haber sido incluido desde un principio. Solamente podemos decir que se ha aclarado la circunstancia por la que la fiscalía trajo al señor Alonso a la causa, y a partir de ahí, se ha visto la realidad y se ha dado cuenta de que no procede». El abogado recordó que los hechos datan de los años 93 y 94: «Fue necesario que el señor Alonso tuviera relación con esta empresa por motivos que no tienen nada que ver con este asunto y que deseamos reservar con la mayor discreción posible, pero que son absolutamente legales, y quizá de ahí ha venido la confusión, pero todo está resuelto».