La artesanía regresa a San Marcelo en forma de ceramistas y alfareros
Muestra de uno de los puestos de la feria del año pasado
Un oficio tarda años en aprenderse. El tiempo, la maña y la experiencia son los factores clave que modelan a un buen artesano. Pero en la vorágine de la vida cotidiana el arte de antaño cae en el olvido y las nuevas tecnologías y la producción en serie sustituyen al valor de poseer una pieza única hecha a mano. La vigesimoséptima Feria de Alfarería y Cerámica comienza mañana para rescatar del ayer una forma de vida que persiste a duras penas en la actualidad. Esta muestra artesanal lleva celebrándose desde que comenzó a festejarse San Froilán y este año se ubicará en la Plaza San Marcelo, un lugar de paso que pretende llamar la atención de todos los leoneses. Las más de 100 solicitudes que se recibieron para establecer un puesto en la feria, son la prueba irrefutable de la consolidación de esta muestra que vende al público productos artesanales. Como novedad, este año no sólo habrá distintos tipos de talleres que complementarán la oferta ferial. Actividades para los niños, demostración de cocción del barro o de modelado será algunas de las iniciativas visuales que pondrán en contacto a artesanos y leoneses para hacer un recorrido por todo el paso de producción de un producto artesanal. Uno de los organizadores asegura que «detrás de cada pieza se esconde amor al trabajo y paciencia», por eso, cada producto expuesto será una muestra de sabiduría y respeto hacia el pasado.