El consistorio anuncia que José María Fernández estará arreglada en un mes

Las obras de reurbanización de la calle José María Fernández estarán finalizadas en torno al 30 de noviembre, según informó ayer la Concejalía de Urbanismo del Ayuntamiento de León, que detalló que «en la última fase de las obras se colocará el mobiliario, el arbolado y las luminarias, tareas que se desarrollarán entre el 13 y el 30 de noviembre, siempre en función de la climatología». «Esta actuación municipal va a suponer una gran mejora, tanto para los vecinos como para los comercios», mantiene los responsables del área urbanística, que lamentan «las molestias que, tanto esta obra como cualquiera de las que se acometen pueden generar». Desde el área que dirige María José Alonso se señala que «la obra no se está financiando con dinero del plan de fachadas del ARI», sino que «está incluida en el programa ARI como una aportación del Ayuntamiento y recibe la financiación del Fondo de Cooperación Local del año 2006 de la Junta de Castilla y León»; al tiempo que «se recoge como prioritaria en la memoria-programa para la declaración de Area de Rehabilitación Integral de la Ciudad Antigua y barrio del Ejido», una zona que «se recomienda potenciar comercialmente, según el estudio de actividad del Ildefe del 2005». Las autoridades afirman que el proyecto «se recoge como una de las sugerencias del Seminario de Participación que se celebró en 2005 a través del programa ReUrban Mobil y del ARI, en el que participaron comerciantes, vecinos, Ampas, y la Universidad de León, entre otros», ya que «potencia la actividad comercial y facilita los recorridos peatonales entre el Ejido y la Ciudad Antigua». Frente a las críticas recibidas, los responsables de Urbanismo mantienen que «el ancho de acera se varía para facilitar la creación de un paseo cómodo y de áreas estanciales, además de que no se reducen las plazas de aparcamiento que existían antes, sino todo lo contrario, salvo las variaciones que se produzcan por nuevas solicitudes de vados (durante las obras se han producido ya dos que han sido autorizadas por el Ayuntamiento), lo que hace que tras las obras se aumenten en 8 los estacionamientos». Otra de las defensas que efectúan desde el consistorio se basa en que «la calle, hay que recordarlo, es de dirección única desde 1997» y que el proyecto «garantiza que el tráfico actual pueda circular en las mismas densidades que antes de las obras, pero elimina la doble fila que era habitual». En la actualidad no se contempla el carril-bici, aunque «el diseño de la calle permite que, en un futuro, y siempre que un estudio integral de la circulación ciclista para toda la ciudad lo recomendase, se pueda abrir». El Ayuntamiento informa de que, en el tramo entre San Pedro y San Juan, «la existencia de una presa en teoría ya en desuso obligó a modificar el trazado de las nuevas redes de servicios», aunque «las acometidas desde José María Fernández se han repuesto y conectado al saneamiento, pero mantienen vertidos de zonas anteriores».