La herencia de una obra

La Junta Agrpecuara de Sahagún presentó alegaciones, primero, quejas después, a la disposición final del puente de la ronda de Sahagún sobre el río Cea. La primera carga de lluvias ha acudido en auxilio d ela razón que presentaban contra la estructura, porque los pasos inferiores de esta variante no «presentaban las condiciones necesarias para hacer enlace entre ambas partes de las fincas, una vez finalizado el nuevo puente», Aquel arguimento teórico pasó a la práctica desde la noche del pasado domingo, tierras y caminos de acceso a las fincas inaccesibles e intransitables por causa de las lluvias que han elevado del nivel del caudal del Cea y han desbordado el río por tramos de conflicto. Las parcelas del entorno del puente se definen ya como un lodazal continuo, que impide que los agricultiores accedan a ellas para realizar los tgrabajos propios de esta época. Los agricultores repararon hace meses en la circunstancia que podía derivar en problemas porque el ancho del río se limitaba a un paso de diez o doce metros escasos. La comarca de Sahagún no localiza en este único punto los problemas de inundaciones en las fincas agrícolas de la zona. Al norte de esta villa el Cea corre al orden de las aguas, a pesar de que recibió obras de encauzamiento. Más al sur, camino de Galleguillos y San Pedro de las Dueñas, las aguas corren aún más lejos del cauce. Es la eterna cantinela del Cea y las lluvias copiosas. Ocurrió hace tres años y se repite ahora. Las previsiones sobre precipitaciones hacer prever que los problemas continúen en las próximas fechas. El sureste leonés no es otra cosa ahora que agua que campa a sus anchas desde el Cea, a derecha a izqquierda.