El Ejido propone que se amplíen dos de sus calles para desahogar los accesos

Con sentimiento de «abandono» y sensación de que hay una operación de «acoso y derribo» se presentaron ayer los representantes de la plataforma de vecinos y comerciantes del Ejido, quienes buscaron el resguardo de los grupos de la oposición municipal para saber «cuál va a ser el proyecto de futuro para el barrio, que se ha quedado como una isla». Los portavoces vecinales volvieron a insistir en que la zona «tendrá graves problemas de accesibilidad, tanto para los coches como para los peatones», cuando finalicen las obras de reurbanización de la avenida José María Fernández, y aprovecharon para acogerse a la moción que presentarán los socialistas en el Pleno del viernes, donde se exige al equipo de gobierno que se paralice el proyecto en su estado actual y lo adecúe para que haya dos carriles a partir de la altura de la calle Batalla de Clavijo, así como que se atenga a lo marcado en el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU). En la reunión mantenida con PSOE y UPL se habló de la posibilidad de solicitar al Ayuntamiento que mejore los accesos en coincidencia con el nacimiento del nuevo sector urbanístico, que se ubicará en el antiguo párking de camiones. Este desarrollo permitiría que las calles San Carlos Borromeo y Víctor de los Ríos, actualmente cegadas por el solar, tuvieran salida a la avenida Real y se habilitase una válvula de desahogo a través del nacimiento de las alrededor de 140 viviendas que se promoverán en la finca, una idea a la que se añade la petición de que haya un área notable de estacionamiento. A expensas de que se escuchen sus ruegos, la plataforma anunció que en los próximos días promoverá una manifestación, en la que aseguraron que estará representada «la gran mayoría del barrio», un respaldo que ya se ha visto con «la recogida de más de 2.000 firmas en cuatro días». «El proyecto tendrá un efecto muy negativo para el barrio», auguraron Rosana Bardón y Yolanda Arias, portavoces de la plataforma, que explicaron que «hay negocios que ya han tenido que cerrar y los que están abiertos se mantienen con pérdidas».