La caída de un vecino dispara la tensión en el barrio del Ejido

Las obras, realizadas por el Ayuntamiento, en la calle José María Fernández, siutada en el barrio del Ejido, siguen siendo un punto de fricción entre los vecinos y el Consistorio. Casi todos los días se producen incidentes -o protestas- que ponen de manifiesto la tensión con la que viven los vecinos la ejecución de este proyecto. Ahora, las voces díscolas, llegan por la caída que sufrió ayer un residente de la zona -de setenta años- en el número 44 de esta calle. «Todos los días se producen hechos de este tipo», manifiesta Ricardo Camino, miembro de la asociación vecinal y testigo de los acontecimientos. Según cuenta, el estado en el que está José María Fernández -«muy mal señalizada y totalmente levantada»- resulta determinante para que se produzcan este tipo de accidentes, «que se dan a diario», espetó. Hasta el lugar de los hechos tuvo que trasladarse una ambulancia para comprobar, según fuentes del 112, que el herido tenía pequeñas contusiones. Los facultativos le atendieron en la misma calle y no hubo que trasladarle al Hospital. A la espera de noticias El Pleno municipal del pasado martes dio para mucho. En él, el alcalde de León, Mario Amilivia, anunció que en esta semana se va a reunir con el presidente de la asociación de vecinos, Manuel Felix García, y representantes del comercio. En principio en este encuentro, que se producirá en los próximos días, se va a hablar de las compesaciones que recibirán los afectados por las obras en la calle José María Fernández. Los vecinos trasladarán al regidor su deseo de que se paralice el proyecto en su estado actual y lo adecúe para que haya dos carriles a partir de la altura de la calle Batalla de Clavijo, así como que se atenga a lo consensuado en el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU). A expensas de que se produzca este acercamiento, la plataforma denuncia «los graves problemas de accesibilidad, tanto para los coches como para los peatones» que tiene la zona. Además, -aseguran- «ya hay algún negocio que ha tenido que cerrar». Movilizaciones El anuncio, por parte del Ayuntamiento , de los trabajos en el tercer tramo del vial sacó a la calle -el pasado jueves- a un centenar de personas que taponaron la entrada a José María Fernández, a la altura de Pendón de Baeza, como medida de protesta. El colectivo vecinal cumplió así su amenaza de movilizarse si el Ayuntamiento no escuchaba sus reclamaciones. Quizá no sea la definitiva. La última sesión plenaria, de carácter municipal, difuminó -bajo el voto de los catorce ediles socialistas- la posibilidad de que se paralicen las obras. El PSOE, con el apoyo de la UPL, se sumó a la demanda vecinal y solicitó al primer edil del Ayuntamiento que «se terminen los dos primeros tramos y el resto no se haga hasta que haya un acuerdo entre las dos partes». Amilivia descartó esta idea y defendió los beneficios del proyecto, una vez finalice. Además, -recordó- que la financiación de las obras sale de la aportación municipal al Ari, «con lo que no se quita nada a los vecinos».