Los alcaldes de los pueblos afectados exigen mayor celeridad en las obras

El alcalde de Murias de Paredes, Horacio Rozas, y su homólogo en el Ayuntamiento de Palacios de Sil, Orlando López, coinciden en solicitar a las administraciones celeridad para asumir sus compromisos con todos los afectados por la riada. «Si volviera a llover se complicarían las cosas», recordó el primer edil de Palacios de Sil, ayuntamiento al que pertenece el municipio de Salientes, donde el temporal destrozó tres de los cinco puentes con los que contaba el pueblo. Aquí, el desbordamiento del río dejó incomunicados, durante cuatro días, a casi una treintena de vecinos. Por su parte, Horacio Rozas, alcalde de Murias, municipio al que pertenece Vivero, cree que, si se confirman las previsiones meteorológicas, las comunicaciones, ahora sólo son posibles a través de una pista que va desde el puerto de la Magdalena hasta el pueblo, quedarían mermadas como consecuencia del temporal. «Los todoterreno no tendrían problema, pero los turismos, quizá, quedarían encallados», matizó. Además, Orlando López, recordó que la nieve, que aparece todos los años en esta parte de la provincia, volvería a dejar aislados a los vecinos, «sino se arreglan definitivamente los puentes». «Como medida provisional está bien, pero en cuanto venga el mal tiempo volverá a pasar lo mismo», subrayó el regidor, a la vez que recordó a la Diputación que este Ayuntamiento, el de Murias de Paredes, sólo tiene una máquina quitanieves. «La pala no es capaz de pasar por estas pasarelas», adelantó. La realidad en Salientes, después de varios días de reproches políticos entre el alcalde y el diputado de infraestructuras Ángel Calvo se normaliza, al igual que la situación de sus ciudadanos. La tregua que dio el cielo agilizó las obras, que aunque no son definitivas, ya permiten el paso de vehículos. Las últimas lluvias se cebaron también con los habitantes de Castrocontrigo. El alcalde de esta localidad, Aureliano Fernández, exige al Ejecutivo central y autonómico que arregle, «lo antes posible», los desperfectos que ocasionó el temporal. Ayer, aunque llovió, no se produjeron problemas. En Castrocalbón también cayó una tormenta fuerte, incluso traía granizo, pero no hubo ningún desperfecto. Valencia de Don Juan Los lagos del complejo La Isla de Valencia de Don Juan han sido los que más daños han sufrido por la riada del pasado 26 de octubre. Ayer, el director y el jefe de la obra, visitaban la zona para evaluar los daños. En cuanto a quien asumirá el coste de los desperfectos causados por la crecida del Esla, el teniente alcalde de Valencia, José Jiménez, aseguró que «habrá que hablarlo con la empresa constructora, pero de todas maneras intentaremos conseguir ayudas de la Junta de Castilla y León y de la Diputación Provincial». Se espera que dentro de dos semanas, se tenga una cuantificación de los daños. La riada también afectó a parte de la nueva escollera ya que, según José Jiménez, «aún no había terminado de compactarse porque sólo llevaba dos meses terminada y el agua, al bajar, ha roto un trozo».