La Lada-Velilla conduciría energía para vender a Europa y Marruecos

Basándose en la ley de la oferta y la demanda que mueve el mercado económico, el profesor titular de Economía Financiera y Contablidad de la Universidad de León Julio Lago ha llegado a la conclusión -tras analizar en profundidad los datos de la web de Red Eléctrica Española- que la producción que generaría la línea de alta tensión Lada-Velilla se destinaría a la exportación. El economista destacó ayer en Ciñera que el balance eléctrico español demuestra que existe «un margen de cobertura muy amplio para atender las necesidades de kilowatios de viviendas y empresas». La capacidad de generación, lo que el sistema está preparado para producir, es de 73.907.000 de kilowatios. El 17 de julio de este año se batió un récord de consumo eléctrico alcanzando casi los 41.000.000 de kilowatios. «Con estos datos, en el peor de los escenarios, el sistema aseguraría la producción de 50.000.000 de kilowatios, nivel muy por encima del consumo máximo». Julio Lago añade a esta situación el hecho de que el tiempo medio por incidencias en la red de transporte no ha superado los cinco minutos en los últimos cuatro años. «La calidad del servicio es muy satisfactoria», destacó el economista analizando también la energía no suministrada por incidencias -menos de un millón de kilowatios- y la evolución de la tasa de indisponibilidad -inferior al 2%-. «El sistema eléctrico español no sólo atiende sin dificultades la demanda nacional de energía, sino que incluso tiene capacidad para exportar a otros países, como ya se ha hecho en el 2004 y en el 2005», precisó Lago. España envió más de 1,3 millones de kilowatios a Francia, Portugal, Andorra y Marruecos «lo que pone de manifiesto que no son las necesidades de kilowatios de los ciudadanos españoles las que justifican la línea de alta tensión Lada-Velilla, sino meras y claras razones de negocio y de rentabilidad empresarial», remató el profesor de la Universidad de León. «Cicatriz en el paisaje» El patrimonio natural es, según Lago, es el único recurso con el que cuentan las comarcas que atravesaría la línea de alta tensión tras ir perdiendo fuerza o desapareciendo la minería. «Las torretas de la línea sería una cicatriz en el paisaje que condenaría al ostracismo a las zonas por las que pase», explicó el profesor universitario, quien puntualizó que sería «mortal», sobre todo teniendo en cuenta que son áreas declaradas Reserva de la Biosfera por la Unesco y que pretenden basarse en el desarrollo sostenible. REE afirmó el pasado 17 de julio, cuando se alcanzó el récord de consumo eléctrico, que «no hubo ningún problema para atender esa punta de demanda». Atiendo a esta cifra, a la media diaria de consumo eléctrico y al capacidad de generación «la línea de alta tensión por la Cordillera Cantábrica no es necesaria». Lago explicó ayer que aunque no la oferta máxima que puede ofrecer el sistema -74 millones de kilowatios- es la cantidad adecuada, pero que en ningún caso es necesario aumentarla para el consumo de España.