El bedel del Azcárate insiste en que no denunciará a sus agresores

El bedel del colegio Gumersindo Azcárate, al que golpearon dos personas cuando se encontraba en su puesto de trabajo, no tiene previsto -por ahora- denunciar a los presuntos agresores, según ha podido saber este periódico por diversas fuentes. El conserje, que continúa de baja, se encuentra tranquilo y lo único que quiere es que se calmen las cosas para volver al centro, ya que -según las mismas fuentes- piensa que todo se ha magnificado y no quiere darle más importancia. Por el momento, el ordenanza sigue sin querer hablar con los medios de comunicación y no tiene intención de hacer ninguna declaración sobre los hechos que acaecieron el pasado ocho de octubre. Este día, el portero intentó que un alumno -de primaria- entrara en clase después del recreo. Un familiar y un amigo de éste, que paseaban por la calle, saltaron la valla de la escuela y pegaron al ordenanza -ocasionándole lesiones leves- porque creían que estaba maltratando al niño. Sin declaraciones La dirección de la escuela, como ya adelantó Diario de León, ha puesto una denuncia en la Policía Local contra los presuntos agresores. El atestado, que obra ya en poder del juez, está a la espera de su instrucción. Por su parte, la encargada del colegio tampoco quiere hablar sobre el tema, «porque siempre me he mantenido al margen» y explica que este tipo de problemas «deberían quedar dentro del ámbito docente». La dirección provincial de Educación se reunió el miércoles con el Ayuntamiento para incrementar la vigilancia policial en los alrededores del recinto, aunque, explican desde la escuela, por el momento no se ha producido ningún incidente.