Vuelve a aplicarse el de 1993, que avisa hasta dos veces del cambio de vía con un semáforo amarillo
Adif cambia el sistema de señales de las vías tras el accidente de Villada
Este cambio lo habían solicitado los sindicatos en abril del 2005, tras el siniestro de Torneros
Desde hace poco más de quince días, el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) está cambiando el sistema de señales que regulan el tramo de vía entre Leon y Palencia, en el que se produjo el descarrilamiento del tren Intercity, el pasado 21 de agosto y que costó la vida a siete personas e hirió a otras 36. Según ha informado a este periódico a través de distintas fuentes sindicales, el Adif ha comenzado a modificar el sistema por el que se avisa a los maquinistas de los diferentes cambios que se producen en la circulación. La principal variación radica en la información que se ofrece desde los semáforos, ya que antes del accidente de Villada, cuando iba a realizarse un cambio de vía -y, por tanto, un cambio de agujas- un primer semáforo con los colores amarillo y verde avisaba al conductor de lo que iba a encontrarse y le indicaba que debía ir reduciendo la velocidad, pero ya el siguiente semáforo -tres kilómetros después- aparecía verde, o lo que es lo mismo tramo de vía libre. Desde los sindicatos, siempre se ha defendido que se varíe esa información, de tal forma que ese segundo semáforo también sea una señal de peligrosidad. «Esto es absolutamente necesario, ya que con el semáforo verde todo queda en manos del maquinista, ya que el sistema de frenado Asfa no actúa, al detectar que es un tramo de vía libre», aseguran las fuentes sindicales consultadas. A partir de ahora, se vuelve al sistema anterior, concretamente al de 1993. Este cambio significa que ese segundo semáforo, que hasta el momento estaba iluminado en verde en todos los casos -siempre según las fuentes consultadas-, desde ahora estará en amarillo, con lo que además de alertar al maquinista del cambio o del peligro y de la necesidad, por tanto, de reducir la velocidad, permitirá que el sistema de frenado Asfa actúe automáticamente, dado que ya no detecta vía libre, algo que no estaba sucediendo. «Es una aberración dejarlo todo en manos del maquinista, cuando además se cuenta con un buen sistema de frenado», puntualizan las mismas fuentes. Después de Torneros Cabe recordar, que los sindicatos habían reclamado en reiteradas ocasiones que se realizaran estos cambios, sobre todo en abril del 2005, después del descarrilamiento del tren en Torneros del Bernesga. En ese momento no se llevó a cabo, porque los servicios de cercanías se veían afectados, ya que para ellos suponía un retraso de varios minutos, que podía llevar a hacer necesario un cambio en los horarios de determinadas rutas. Desde las fuentes consultadas por Diario de León se deja claro que el anterior señalización anulaba la operatividad del sistema Asfa y dejaba todo en manos del maquinista. A partir de ahora, lo que primará será el sistema de frenado. «Hay que tener en cuenta que un tren no es un coche y que a una velocidad de más de 100 kilómetros por hora precisa de una distancia de más de un kilómetro hasta que termina de frenar», explican las citadas fuentes, quienes lamentan que los que deciden hayan tenido que darse cuenta después de un siniestro de esta naturaleza.