La Junta prevé que más de la mitad de las patrullas forestales trabajen durante once meses en el 2008

La Junta de Castilla y León ha propuesto a los sindicatos mejoras en las condiciones laborales de las cuadrillas que en la actualidad están ligadas a trabajos forestales que operan en la época estival, con el objetivo de que en el 2008 más de la mitad de las mismas trabaje durante once meses al año. Al respecto, según un documento al que ha tenido acceso Ical, el Gobierno autonómico pretende comprometer proyectos para que en el 2008, setenta cuadrillas trabaje durante once meses al año y 58, durante tres. Estos datos suponen una media de 7,4 meses por grupo de trabajadores para el 2008, con un aumento del 17,1% respecto a este año, que se cerrará con una media de 6,3 meses por cuadrilla. En este sentido, en este ejercicio, de las 131 cuadrillas contabilizadas, 42 trabajarán tres meses; 46, siete meses; 30, diez meses; cinco, otros tantos meses; cuatro, seis meses; dos, cuatro meses, y una lo hará once meses. En total, 825 meses, con una media de 6,3 meses por cada una de las cuadrillas. Asimismo, en 2007, la Junta pretende que laboren 128 cuadrillas, las mismas que en el 2008, de las que 58 lo harán tres meses; 57, once y 13, siete meses. Estas cifras representan una media por grupo de trabajo de siete meses. El documento de negociación presentado por el Ejecutivo autonómico constata que pasar de tres meses de trabajo a once supondrá una inversión de 200.000 euros por cuadrilla. El secretario de Medio Ambiente de CC.OO. en la comunidad, Juan Antonio López Murillo, reclamó a la Junta que adelante el objetivo del 2008 de 70 cuadrillas durante once meses al próximo año. Asimismo, pidió al Ejecutivo autonómico que aumente de tres a cuatro meses la reconversión del resto de cuadrillas, para el periodo de más riesgo de incendios. En cuanto a las inversiones previstas por cada incremento de duración de tres a once meses, insistió en que el Gobierno autonómico está inflando las cifras. En este contexto, López también recordó que el reto es extender a toda la comunidad lo que son los proyectos de acción integral en los montes, con inversiones todo el año y que han funcionado sólo en algunas zonas de León. Helitransportadas El texto puesto sobre la mesa también contempla un acuerdo sobre el mantenimiento de las cuadrillas helitransportadas todo el año, con un horizonte hasta el 2011. Al respecto, en el 2007 se prevé la actuación de seis bases durante seis meses, con un coste de 840.000 euros; en el 2008, nueve bases a medio año, con 1,2 millones de presupuesto; en el 2009, 13 bases en seis meses, con 1,75 millones; en el 2010, las 20 bases de la comunidad operarían seis meses, con gastos por 2,5 millones, y en el 2011, 13 bases trabajarían ocho meses y siete, seis, por 3,1 millones. En este sentido, López resaltó que es fundamental aumentar los períodos en los que operan estas cuadrillas más allá de las épocas de riesgo, ya que en la actualidad sólo se controlan las quemas de rastrojos en 8.000 de las 20.000 hectáreas en las que se practican, cuando constituyen un gran peligro. Además, subrayó que es «fundamental» la renovación de la flota de aparatos. El documento de debate precisa que un 33% de este personal debe mantenerse todo el año haciendo prevención indirecta, quemas, fajas, desbroces y el resto de selvicultura. Asimismo, el 33% procederá de trabajadores forestales jóvenes que durante el año realizan todo tipo de trabajos forestales, incluida la plantación, algo que ya ocurre. Por último, se expresa que el restante 33% «debe ser estudiantes, deseablemente en materias forestales, que pueden permanecer algún tiempo más a la espera de empleo adecuado a su formación». Por último, el informe apuesta por extender el sistema de descanso por módulos, que establece un procedimiento reglado basado en las predicciones meteorológicas, y prevé paradas de dos, cuatro, seis o totales de ocho horas.