Antibióticos sólo ha comprometido la mitad de la inversión anunciada

Los retrasos en el proyecto de recuperación económica de Antibióticos, reconocidos la semana pasada por la empresa, no han causado tanta sorpresa como el optimismo sin matices de la Administración central, que consideró por boca del director general de Desarrollo Industrial, Jesús Candil, que el Plan Industrial pactado hace un año va «mejor de lo previsto». Sin embargo, las cuentas presentadas en la mesa de seguimiento de este plan reflejan que las pérdidas de la compañía sólo se redujeron 5.286 millones de euros (en los diez primeros meses del actual ejercicio) en lugar de los 13.376 previstos inicialmente; mientras que Vitatene, el salvavidas de la compañía química, facturó hasta octubre 2.498 millones de euros, lejos de los algo más de 7.000 que se calculaban en el plan presentado hace un año (un 35% de la previsión). Así las cosas, las pérdidas de la compañía para este año serán muy superiores a los alrededor de 2.900 millones de euros previstos. Aquel cálculo se realizó sobre la base de unas pérdidas de algo más de 5.000 millones en Antibióticos, compensadas con el primer año de beneficios de Vitatene, que deberían haber aportado a los resultados globales casi 2.400 millones. Las ventas de esta última empresa, descontados los costes, debían haber sido a finales de este mes de 3.527 millones, mientras que hasta octubre sólo sumaban 542 millones. En el caso de Antibióticos, la facturación en los diez primeros meses del año creció en 3,3 milones de euros, un 9,5% sobre la del total del 2005; mientras que los costes se redujeron en 2,7 millones de euros. Ingresos y beneficios El cálculo de ingresos y beneficios se había realizado en el plan industrial firmado con administraciones y sindicatos sobre la base de un fuerte incremento de la producción, que generaría «ingresos urgentes». Sin embargo, las inversiones que debían haber generado este incremento de la producción se están retrasando, aunque la empresa se reafirma en su compromiso de llevarlas a cabo a tiempo. En la práctica, según el informe de seguimiento del Plan Industrial, la empresa ha facturado o comprometido cinco de los 10,26 millones de euros que debería invertir en Antibióticos, y tiene pendientes de llevar a cabo inversiones por otros 5,6 millones. Los proyectos más adelantados son los de aditivos alimentarios, cuya inversión de 1,5 millones de euros se ha ejecutado ya; y el de penicilina estéril veterinaria, en la que sólo están pendientes 376.300 de los 3,8 millones de euros de inversión previstos. También está ya comprometido más de un millón de los casi dos que costará la primera fase del inmunosupresor; a los que habrá que añadir otros 3,4 millones de euros. Ya se ha destinado también algo más del 80% de la inversión prevista en la zona limpia; y un 21% de los procesos para elaborar nuevas cefalosporinas. La empresa recordó la semana pasada que factores como las materias primas, los precios de la energía y el cambio dólar/euro habían tenido efectos negativos en el resultado.