Una embarazada y su hijo saltan por la ventana para no morir calcinados

Una joven rumana embarazada de seis meses y su hijo de tres años salvaron la vida ayer al saltar por la ventana del salón de su domicilio, a cuatro metros de altura, tras declararse un incendio en el inmueble que habitaban, por un problema en el sistema eléctrico, según fuentes del Cuerpo de Bomberos de León. La colaboración ciudadana evitó que se produjeran desgracias de mayor calibre, al improvisar los vecinos un sistema de amortiguación para la caída, gracias una lona sujetada a mano por media docena de personas. Los hechos se produjeron en torno a las 17.15 horas, en el barrio de La Asunción, cerca del complejo hospitalario de la capital. El segundo piso del número 2 de la calle Peña Larzón, fue pasto de las llamas a consecuencia de un incendio, que se inició en el salón y el dormitorio, según señaló a este periódico la antigua propietaria del inmueble, y que rápidamente se propagó al resto de la casa. El humo y el fuego conformaron una cortina que impidió a madre e hijo escapar por la puerta, ante lo cual se asomaron a la ventana exterior y comenzaron a pedir auxilio, de acuerdo a las versiones facilitadas por los testigos de los hechos a pie de calle. Los vecinos lograron convencer a regañadientes a la joven de que lanzase a su hijo a la lona por la ventana, tras lo cual, pese a su avanzado estado de gestación, y presa de un estado de nervios notable, también decidió saltar ella. Tras la caída, y a consecuencia del impacto contra la lona, uno de los vecinos que la sujetaba, sufrió una fractura en un dedo. También resultó herido otro vecino, que trató de derribar la puerta del inmueble y sufrió cortes en los nudillos de una mano y en la cabeza, según los testimonios recogidos en boca de testigos presenciales. En torno a las 19.30 horas, los bomberos dieron por finalizadas las tareas de extinción, y la zona volvió a la normalidad.