Los trabajadores se concentran esta tarde ante la sede de la empresa en señal de protesta
Antibióticos reduce a la mitad la plantilla de las subcontratas de mantenimiento
Los empleados se cuestionan el interés de la multinacional y advierten del abandono
El inicio del ejercicio del 2007 comienza para Antibióticos salpicado de nuevo por la conflictividad laboral, aunque en este caso el problema se centra en trabajadores que no son empleados de la empresa, sino de las subcontratas que se encargan de las labores de mantenimiento. A pesar de haber realizado ya recortes de empleo en los últimos meses en las dos empresas subcontratadas para la realización de las labores de mantenimiento en electricidad y control y en tareas mecánicas, de nuevo los ejecutivos italianos han llegado a León con un recorte de gastos debajo del brazo, que una vez más se va a traducir en un inminente recorte de la plantilla. En concreto, a partir de finales de este mes se rescindirán los contratos de doce de los 22 empleados de la empresa que realiza las labores eléctricas y de control; y de seis de los 20 que realizan las tareas mecánicas. Ambos grupos de trabajadores se encargan del mantenimiento de las instalaciones de Antibióticos, Vitatene y la depuradora de la empresa. Como medida de protesta, los trabajadores afectados han convocado una protesta esta tarde, a partir de las 19.00 horas. Con el apoyo del comité de empresa de Antibióticos y de los delegados sindicales de Vitatene, que han llamado a la participación a todos los trabajadores del grupo, se realizará una concentración ante las instalaciones de la empresa. Décadas en la empresa Aunque en los últimos años los servicios de mantenimiento se han subcontratado a varias empresas, éstas han mantenido al personal que venía desarrollando las tareas de mantenimiento. De hecho, la práctica totalidad de los afectados lleva más de una década trabajando para Antibióticos, aunque cobrando a través de otras sociedades. Sin embargo, y a pesar de padecer los problemas de la empresa como el resto de los trabajadores, esta condición ha impedido que los empleados de las empresas auxiliares hayan podido beneficiarse de los programas de prejubilaciones y bajas incentivadas con los que la multinacional italiana Sir Fidia (y antes Montedison) ha venido realizando sucesivas reducciones de plantilla. De hecho, los trabajadores afectados por este nuevo recorte consideran que sus despidos suponen en la práctica una nueva reducción del número de empleos en esta compañía. Tanto los trabajadores empleados por las empresas auxiliares como el comité de empresa han mostrado su preocupación por la decisión de la multinacional italiana, ya que los nuevos despidos no hacen sino agravar la situación de descuido de las instalaciones que ha venido siendo denunciada reiteradamente en los últimos meses. Fuentes consultadas han asegurado incluso que no es la primera vez que uno de los procesos que se desarrolla en la fábrica ha tenido que detenerse por falta de personal adecuado para solucionar un problema de mantenimiento. Desde los representantes de los trabajadores se preguntan qué plan de viabilidad y de futuro ofrece una empresa que reduce tanto su personal de mantenimiento. Estas dos sociedades tenían hace tres años alrededor de una treintena de trabajadores cada uno, y ahora los turnos de noche se verán reducidos a un solo trabajador.